Imagen: EFE*Frank Rumpenhorst
Las tapas de los diarios europeos hablan del "terror" por las manifestaciones.
Ya por la mañana unas 6.000 personas participaron en bloqueos alrededor del banco. Activistas que llegaron en colectivos y trenes de toda Alemania y también de Italia, Grecia y otros países. Se acercaron en cinco "dedos" (columnas), bloquearon puentes y encendieron barricadas. La policía había rodeado el banco con alambre de puas y movilizado a 8.000 agentes y 28 lanzadores de agua -¡todos los lanzadores de agua del país!-. Los manifestantes destruyeron vidrieras y quemaron hasta siete coches de la policía. 18 personas quedaron detenidas al final del día.
A las cinco de la tarde se celebró una manifestación masiva con 20.000 personas, mostrando un repudio enorme a la política de Merkel y su ministro de finanzas, Schäuble. Esta protesta fue convocada por grandes organizaciones reformistas como del partido "DIE LINKE" (La Izquierda), que gobierna en coalición con los socialdemócratas y los verdes en algunos lugares, como en el Estado federal de Turingia, además de otros grupos de izquierda.
Pero el movimiento obrero también estuvo presente en las calles de Francfort.
Por un lado concurrieron trabajadores de Amazon, del mayor almacén de la empresa en Alemania, en Bad Hersfeld. Estos trabajadores luchan desde hace dos años para obtener un contrato colectivo, y este martes y miércoles dejaron de trabajar para sumarse a la protesta contra la austeridad.
A su vez, al día siguiente de la manifestación comenzaba otra huelga, esta vez de las maestras de jardines infantiles. En este sector, el 97% de las trabajadoras son mujeres y tienen muy bajos salarios. Ellas están empezando una lucha por mejores salariales y sobre todo por más personal en las guarderías. Activistas que habían participado en Blockupy se sumaron a esta huelga con 5000 trabajadoras también.
En el caso de los pilotos de Lufthansa, están llevando adelante otra huelga contra el aumento de la edad de jubilación. Aunque el aeropuerto de Francfort, el mayor del país, fue el centro de la huelga, los pilotos no asistieron a la manifestación de Blockupy.
Blockupy muestra un importante rechazo a la política del gobierno alemán dentro del "corazón de la bestia" imperialista.
Los dirigentes de partidos reformistas intentan canalizar esta rabia hacia nuevos "gobiernos de izquierda" y movimientos como Syriza y Podemos, pero – como se empieza a mostrar ahora en Grecia – sólo pueden gestionar la crisis para los capitalistas.
A la vez hay un sector de la izquierda que se busca ligarse con el poderoso movimiento obrero en Alemania – un movimiento encadenado por inmensos aparatos reformistas, pero que está desarrollando sus primeras luchas contra la creciente precarización laboral.
Los trotskistas de la Organización Internacionalista Revolucionara (RIO según sus siglas en alemán, grupo hermano del PTS) participamos en Blockupy junto con los trabajadores de Amazon y estamos luchando para construir una izquierda revolucionaria basada en los trabajadores y la juventud combativa. |