Nunca se fueron, pero ahora volvieron. Una buena noticia entre tantas malas: aparecieron cuentas oficiales de La Polla Records en distintas redes sociales y sus integrantes, Evaristo, Sumé y Abel, publicaron una foto junto con la leyenda "Y yo que estaba muerto me he levantado. La última batalla me está esperando".
Una de las bandas punk más influyentes del habla hispana, cumple 40 años y ¿vuelve a los escenarios? Al menos nos regalan la ilusión...
Hace 16 años se separaron, pero siguen muy presentes. Posiblemente se deba a que La Polla tiene un tema para todo, una canción para cada situación de mierda que afrontamos día a día. Sus letras parecieran no caducar con el paso del tiempo. En ellas se pone en cuestión de conjunto al sistema en el que vivimos.
Viva la mala hostia de mi generación
No es casualidad que para cada problemática tengan una canción. Su juventud estuvo atravesada por una sociedad oprimida por más de 40 años de dictadura fascista de Franco, que se impuso tras derrotar a la revolución española, una de las más importantes gestas de la clase obrera en la historia del Siglo XX.
La transición a la democracia no trajo consigo grandes mejoras. Para La Polla, las miserias que pasaban millones a diario, dieron lugar a una extensa obra que desde una impronta ácida, logró poner en palabras las inquietudes y malestares que nos joden de esta sociedad.
Verse inspirado e identificado en el legado de esta banda tiene sentido. Vivimos días en que la juventud vuelve a ver con buenos ojos la idea de "socialismo".
El contenido de las letras dejan ver pensamientos y posiciones políticas claras que reflejan las vivencias que atraviesan las nuevas generaciones, como el sentimiento antirrepresivo, contra esa institución policial “que come por dar hostias a la gente”. O el asco a la Iglesia, al Estado y a los partidos tradicionales que niegan el derecho al aborto, condenando a la clandestinidad y a la muerte a miles de mujeres. Así también el rechazo a las burocracias sindicales que entregan los derechos y luchas de la clase trabajadora, garantizando mayor explotación para los patrones.
“Nuestra más enérgica repulsa” a las miserias que nos ofrece este sistema tienen que ser el motor para replicar ese sentido crítico que La Polla Records nos ha legado y que, probablemente, siga repitiendo desde nuevos escenarios dentro de poco. |