El pasado viernes, el caso Coca-Cola cerró su primer round con el rechazo, por parte del gobierno, del pedido de Procedimiento Preventivo de Crisis presentado por la multinacional con el objetivo de ejecutar un plan de despidos bajo el concepto de una aparente crisis que los trabajadores han denunciado como trucha, teniendo en cuenta que en el año 2018 facturó 10 mil millones de pesos, aumentó los precios de las gaseosas 60%, en el marco de anuncios de un plan de inversiones de 1200 millones de dólares.
Sin embargo, esta primera definición no terminó con una simple firma entre las partes o una anécdota para el recuerdo, sino que el anuncio vino de la mano de un acuerdo firmado por la patronal y el Sindicato Unido de Trabajadores de la Industria de Aguas Gaseosas y Afines (Sutiaga), para despedir a 32 trabajadores de la planta embotelladora de Pompeya. “Esta cantidad de familias que quedarían en la calle se suma, en lo que va del 2019, a 20 retiros voluntarios y 9 despidos en la planta de Monte Grande; 9 retiros en planta Alcorta; 40 retiros y 9 despidos en planta Parral; 25 retiros voluntarios en la planta de Villa Celina y 20 despidos en la planta Loma Hermosa. Es decir casi 130 trabajadores en las distintas plantas, y pese a eso, pidió PPC en planta Alcorta para despedir a 80 más. Por otra parte, la empresa no cumple fallos judiciales del año pasado que ordenan la reinstalación de nuestro compañero Marcelo Romero”, dijo consultado por este diario, Pablo Silvestri, trabajador desde hace 26 años de Coca-Cola, miembro de la agrupación Marrón opositora a la conducción del Sutiaga, que vienen de protagonizar un importante corte frente a la planta de Pompeya, con gran repercusión en los medios nacionales.
Este accionar es una demostración más de como las cúpulas sindicales juegan del lado de las patronales para descargar el ajuste sobre las espaldas de los trabajadores. “Los trabajadores de Coca-Cola Femsa rechazamos el acuerdo que sellaron entre el gobierno, el sindicato y la multinacional, que deja liberada a la empresa para despedir a 32 trabajadores, hacer traslados compulsivos de personal y flexibilizar las condiciones de trabajo. De hecho, la patronal usa al servicio médico de planta, para negar el alta médica a trabajadores y así desvincularlos una vez pasado el tiempo de reserva del puesto, como también el ofrecimiento de retiros "voluntarios" que no son más que despidos encubiertos. Desconocemos el acuerdo Sutiaga Coca Cola porque fue inconsulto a las bases. Los trabajadores de Alcorta, fueron convidados de piedra”, enfatizó el trabajador de la agrupación Marrón.
El preventivo de crisis no fue aprobado por la Secretaria de Trabajo, "producto de una mera especulación de la Cartera. Desde un principio la opinión pública se puso del lado de los trabajadores y en contra de la supuesta crisis de la multinacional Coca Cola. Además fue muy importante el accionar de los trabajadores agrupados en La Marrón, la comisión de mujeres y los despedidos que no dudaron en salir a las calles realizando una fuerte protesta frente a la planta Alcorta que tuvo repercusión nacional. La preocupación para nosotros continúa porque habilita el despido de 32 familias. Los trabajadores no vamos a permitir los despidos pactados por el sindicato y la empresa, por esto convocamos para el día jueves 28 de febrero a una concentración en Corrientes y Callao a las 7 de la mañana, para luego movilizarnos a la Secretaría de Trabajo ubicada en Av. Callao al 100. Nuestra lucha hoy pasa por enfrentar, junto a las mujeres y nuestras familias, la política de ajuste que quiere implementar la patronal para impedir que haya un solo despido, ni un traslado, ni suspensiones. No bajaremos los brazos".
La lucha contra los despidos que la multinacional, que se define como la embotelladora más grande del mundo, quiere descargar sobre sus trabajadores continúa, y desde la Marrón junto a la Comisión de Mujeres, llaman a solidarizarse como también a acompañar la pelea contra el ajuste en Coca Cola Femsa y en otras empresas, como en Fate y en Siam, en Madygraf y Pilkington. Como anunció Silvestri, este jueves realizarán un corte Corrientes y Callao para rechazar el acuerdo firmado entre el sindicato y la empresa, promovido por el ministro de Producción y Trabajo Dante Sica y el gobierno de Macri.
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