Este 7 de marzo, un día antes del Paro Internacional de Mujeres, se cumplen 7 años del asesinato de la Pepa Gaitán. Tras este crimen transfóbico, ocurrido en la Ciudad de Córdoba, esta fecha se convirtió en el Día de la Visibilidad Lésbica.
El asesinato de la Pepa, generó una acción política para ocupar la calle, construir comunidad y mostrar la diversidad de formas de vivir, el lesbianismo y translesbianismo, con un reclamo constante contra la Iglesia que reproduce un ataque sistemático a la diversidad sexual.
Hoy, a este día se le suma el de la exigencia por la absolución de Higui, una lesbiana que fue presa y aun se encuentra procesada por defenderse de una violación correctiva.
Las instituciones como las Iglesias, tanto católica como evangélica, son el principal enemigo de la diversidad y del movimiento de mujeres. Y todos los Gobiernos, kirchneristas y de Cambiemos, las financian. Bergoglio fue aquel que llamó a una “guerra santa” contra la homosexualidad y contra las teorías de género.
Este año particularmente es importante la visibilidad lésbica, en el contexto de que Higui está procesada por ser lesbiana y su ataque fue claramente correctivo. La justicia actuó en función de ese correctivo también. El 8 de Marzo volvemos a marchar no sólo por Higui sino por todes y cada une de las víctimes de la violencia machista.
La diversidad sexual está tomando las calles, como campo de disputa contra quienes arrebatarles sus derechos. Contra las instituciones clericales oscurantistas que impone la heterosexualidad como única forma de relacionarse, la policía que hostiga y persigue con sus códigos contravencionales y el Estado que legitima la violencia machista y homolesbotransfóbica.
Este 8 de Marzo sobran los motivos para salir a luchar, el fin de la homolesbotransfobia y #AbsoluciónParaHigui serán parte de las exigencias del #ParoInternacionalDeMujeres.
En las próximas horas se vivirá una jornada de lucha en la que las mujeres, con las trabajadoras al frente, harán que la tierra tiemble. |