Amanecía pronto este 8 de marzo para Las Kellys Barcelona, que desde 7:30h de la mañana se concentraban en el centro de la ciudad condal para iniciar su jornada de piquetes.
No estaban solas, junto a ellas, las compañeras de Pan y Rosas y compañeros de la agrupación juvenil ContraCorriente que con otras jóvenes y estudiantes han formado un cortejo de casi un centenar de personas.
La primera parada se ha realizado en el hotel Princess, donde nuevamente han hecho oír sus demandas “¡Basta de externalizaciones!”, “¡No a la subcontratación!”.
Frente al hotel Antiles, la segunda parada de la mañana, han denunciado la explotación y precariedad de las camareras de hotel, por cobrar 1’50 euros por cada habitación. Además en este hotel en concreto Las Kellys denuncian el despido de trabajadoras sin pago alguno.
Uno de los momentos más simbólicos de la mañana ha sido cuando el cortejo de Las Kellys se ha parado frente al hotel Palace - Ritz. El hoy lujosos hotel situado en la Gran Vía de Barcelona fue durante la Guerra Civil un comedor social.
Tras la parada en el Ritz el cortejo ha seguido su recorrido cortando una de las arterias principales de Barcelona, la Gran Vía. Para ese momento ya se habían ido sumando más y más compañeras al cortejo que avanzaba hacia su siguiente destino.
El cortejo de un centenar de personas ha llegado al hotel de la cadena Novotel, uno de los hoteles más grandes de la zona del 22@, ejemplo de especulación urbanística de los últimos años de la ciudad condal.
Como no podía ser de otra manera los piquetes han finalizado, ya rozando el mediodía, frente al Grand Hotel Central. Actualmente uno de los puntos de conflicto más importantes de Las Kellys.
El Grand Hotel Central, propiedad de Pau Guardans, nieto del histórico político Francesc Cambó (franquista reconocido desde el año 35).Guardans ha despedido a dos empleadas, entre ellas la delegada sindical de Las Kellys, y es que el Grand Hotel Central es uno de los cuatro hoteles en Barcelona donde este sindicato de luchadoras incansables tiene sección sindical.
Tras esta última parada y previo “saludo” a las puertas de la patronal de Hostelería, situada en la misma Vía Laietana, han emprendido su camino a la manifestación estudiantil, devolviendo el apoyo y la solidaridad al centenar de jóvenes que hoy han estado con ellas, codo a codo, gritando “!Basta ya de externalizaciones!, ¡Viva Las Kellys!”.
Materializando así la unidad de trabajadoras y estudiantes, solidarizándose con las miles de jóvenes que han salido a la calle en la manifestación estudiantil de este 8 de marzo contra la violencia machista. Pero también contra la precariedad y la explotación, doblemente sufrida por ser jóvenes y por ser mujeres. Una precariedad que conocen muy bien Las Kellys y a la cual se enfrentan y plantan cara cada día.
| 
