Numerosas organizaciones de la diversidad sexual, así como familiares de víctimas de transtravesticidios marcharon el viernes para exigir por todos los derechos que faltan.
La marcha del 8 de marzo fue convocada en Córdoba bajo la consigna de Paro de Mujeres, Lesbianas, Bisexuales, Travestis y Trans. Numerosas organizaciones que pelean por los derechos de la diversidad sexual se hicieron presentes, como así también familiares de víctimas de transtravesticidios y personas no agrupadas.
Pía, coordinadora de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros filial Córdoba, comentó a La Izquierda Diario que es importante marchar “por seguir la historia, por todas las compañeras que quedaron en el camino, por las asesinadas, por seguir, por luchar, por estar en el camino, por seguir conquistando todos nuestros derechos que nos debe el estado”. Manifestó además que se está llevando adelante un transgenocidio, en referencia a las 21 compañeras muertas en lo que va de 2019. Cuatro de ellas fueron asesinadas en Camino de Cintura en Buenos Aires “donde tiene mucho que ver la policía y funcionarios de alto rango”.
Pía agregó que quienes opinan que las personas trans no tienen que marchar “si quieren fama que la vayan a buscar a otro lado porque las trans vienen luchando hace mil años y con nosotras no van a poder nunca, estamos más fuertes que nunca”. Por último, exigió inserción laboral trans, “porque decir cupo es decir límites. Nos sentimos discriminadas con esa palabra, si somos capaces, si estudiamos, si nos preparamos para poder trabajar como cualquier individuo. El tema es que se acaben los prejuicios y se respete en Córdoba la ley de identidad de género”.
También estuvo en la marcha Soledad, hermana de Laura Moyano, una joven trans que fue asesinada en el 2015. Soledad contó que fue en representación de Laura: “Vengo a representarla como mujer, porque nosotros como familiares la sentíamos como mujer a Laura, ella estaría acá si estuviera viva. Hay que poner un freno a los travesticidios y transfemicidios, mientras más ponemos y más luchamos, paramos esto que en algún momento se tiene que frenar. Seguimos luchando con todas las chicas trans, con las lesbianas, con las tortas y por supuesto lucho por mi hermana”.
Paola, de Pan y Rosas, explicó que “el ascenso de la derecha viene socavando y arremetiendo contra todos los derechos de la diversidad sexual, como pasa en Brasil con los ataques de Bolsonaro, habiendo una guerra hacia la homosexualidad en Estados Unidos también, con Trump, y en Rusia, con los campos de concentración en Chechenia. Creemos que este ascenso de la derecha no se puede combatir sino es en unidad con el resto de la clase trabajadora, reivindicando el inicio combativo que tuvo la diversidad sexual, que siempre se unió a las demandas de los sectores oprimidos. Esa es la única salida que tenemos para lograr ejercer nuestros derechos”.
Nico es un compañero trans y también se movilizó con Pan y Rosas. “Quienes nos identificamos como disidentes sexuales tenemos que marchar hoy, con los compañeros varones también, porque en cierto modo estamos reclamando por nuestros derechos. Y también porque en el contexto de ajuste de Macri nuestros derechos son vulnerados, no solo los de las mujeres cis sino los de la diversidad. También nos matan, nos niegan la posibilidad de trabajar, y somos les primeres en ser despedides”.