"Las mujeres y los niños fueron secuestrados del lugar después de la llegada de las tropas.", dijo un vecino de Damasak a los periodistas.
La semana pasada fueron encontrados decenas de cadáveres en Damasak por tropas de los países vecinos, Chad y Níger, que ocuparon la ciudad enfrentando a las milicias de Boko Haram. La ciudad de Damasak aún se encuentra bajo control de los ejércitos de esos países. Las autoridades nigerianas no han hecho declaraciones sobre el secuestro masivo denunciando por los habitantes de la ciudad.
Las tropas nigerianas encabezan una ofensiva conjunta con otros ejércitos regionales para derrotar a Boko Haram, a pocos días de las elecciones nigerianas que se realizarán el 28 de marzo.
La intervención militar contra Boko Haram está formada por los ejércitos de Nigeria, Niger, Chad y Camerún, que a su vez cuentan con el apoyo, drones y entrenamiento de los ejércitos de Francia y Estados Unidos. La fuerza está integrada también por mercenarios, como los de la antigua empresa de seguridad privada Executive Outcomes, formada por ex militares sudafricanos. También se conoció la presencia de mercenarios provenientes de Europa del este.
El gobierno de Nigeria aseguró en las últimas semanas que esta ofensiva ha permitido “recuperar” para su control más de 30 localidades, frenando el avance de Boko Haram. Ese es, al menos, el mensaje que quiere dar el actual presidente nigeriano, Goodluck Jonathan, a pocos días de unas elecciones donde intenta ser reelegido.
Boko Haram es un grupo que defiende la ideología reaccionaria de aplicar la “Ley islámica” al conjunto de la sociedad y que la impone mediante el terror, el secuestro y asesinato de la población local. Este grupo nació en 2002 y ha avanzado en controlar gran parte del norte de Nigeria, de mayoría musulmana, a diferencia del sur de mayoría cristiana.
Boko Haram emergió hace unos años apoyándose en la desesperación de una población hundida en la pobreza extrema, la corrupción del gobierno, la descomposición del Estado y la aguda crisis social, señalando a “Occidente” como origen de esa situación y ofreciéndose como salida. Poseen fuertes lazos con gobernantes locales y a nivel internacional hace unas semanas se difundió un video donde juraban fidelidad al Estado Islámico. En los últimos años ha redoblado sus métodos reaccionarios de secuestros y asesinatos.
Pero el gobierno nigeriano también ha cometido asesinatos masivos de la población civil y ha efectuado numerosos fusilamientos en centros de detención como parte de la “guerra contra el terrorismo”. Últimamente miles de personas han sido asesinadas en los enfrentamientos entre este grupo y las fuerzas militares del gobierno.
Nigeria tiene una población de 170 millones, es el país más poblado de África. También posee riquezas naturales subterráneas de gran valor. Actualmente es el primer productor de petróleo de África, la primera economía del continente, superando a Sudáfrica. Es el primer exportador de petróleo a países como España y el octavo exportador al mundo. Pero el 80% de los beneficios derivados de la venta de petróleo está destinado tan sólo al 1% de la población. El 68% de la población se encuentra bajo la línea de la pobreza, tiene una tasa de desempleo del 24% y la esperanza de vida al nacer no supera los 52 años.
La zona del delta del Níger es un verdadero paraíso para las multinacionales como Shell, Chevron, Texaco, Exxon Mobil y otras. Las multinacionales alemanas, inglesas, chinas y estadounidenses se apropian de grandes extensiones de tierras, expulsando grandes sectores de la población rural que se dirigen a las grandes ciudades buscando apenas sobrevivir.
Desde hace más de un año Boko Haram mantiene secuestradas a más de 200 niñas (se especula que muchas pudieron ser vendidas a redes de trata y otras “casadas” a la fuerza con integrantes de Boko Haram). Las acciones de este grupo son uno de los temas que más influirán en el voto de los nigerianos el próximo sábado.
Desde que comenzaron los enfrentamientos entre Boko Haram y el ejército nigeriano, hace unos seis años, se produjeron más de 13.000 muertes y más de 1,5 millones de personas fueron desplazadas. |