Es como una secuencia de fotos, de testimonios, de lugares, de calles, de las desapariciones, de marchas, de la impunidad, de juicios, de muerte, de torturas, de las ausencias, de la ausencia de restos. De secretos, de los archivos secretos, de complicidades; de comandos operativos, de las desapariciones, de presos, de presas, de cárceles, de militantes, de botines de guerra, de robos, de distintos gobiernos, de exilios, de dictadura, de bebés y de embarazos, de los exilios internos, de héroes de guerra, de imperialismo, de hambre, de pobreza, de tristeza; de un nunca más, de dos demonios, de miles de marchas. De exigencias, de cuerpos, de clandestinidad, de búsquedas, de discusiones, de la lucha, de identidades, de derechas y de izquierdas, de expedientes, de legajos, de investigaciones, de pistas, de declaraciones, de organismos, de llantos, de poderes judiciales, de dolor. De fotos, de imágenes, de muchas ausencias y muchos olvidos... de política, de política más que nunca.
Veo hoy esas imágenes como muchos otros años pero hoy tienen otro giro, un giro nuevo y desafiante por el momento en el que estamos; el giro es otro, el camino es otro.
El 24 marché con la izquierda, me vine de este lado. Marché con la izquierda por que me permite pensar en otras luchas, en todas las luchas revolucionarias.
Por que en la izquierda no tengo que discutir la tranza con la derecha por una alianza por más oportuna que sea.
Por que acá no hay Bernis, ni Milanis, ni posibles si quiera,
por que de este lado no hay Proyecto X
por que desde acá todes les hijos e hijas encuentren quizás la verdadera militancia de muchos de lxs detenidxs desaparecidxs.
Por que de este lado no hay Bergoglio,
ni tranzas con las cúpulas eclesiásticas y civiles cómplices.
Por que de este lado no hay celestes.
Por que desde este lado se exige... por que de este lado se sigue exigiendo justicia por Jorge Julio López, más allá de los gobiernos...
por que no podemos seguir callando a Julio López, ni a Santiago, ni a Mariano, ni a Luciano, ni sigo la lista...
Por que como en una secuencia de imágenes de las más crudas, atroces y horribles que sucedieron, y siguen sucediendo, el tiempo avanza y la lucha avanza, y no hay tiempo para indecisiones y no hay manera de no ver más. Para avanzar, para no dejar de avanzar, pues si no retrocedo.
A 43 años del Golpe Genocida.
BASTA DE IMPUNIDAD
BASTA DE COMPLICIDAD
JUICIO Y CASTIGO
NO OLVIDAMOS, NO PERDONAMOS, NO NOS RECONCILIAMOS
SON 30.000.
PRESENTES, AHORA Y SIEMPRE
NUNCA MÁS
Y,
¡QUE DIGAN DÓNDE ESTÁN!
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