Estudiantes universitarios, secundarios, terciarios y jóvenes trabajadores se reunieron ayer junto con Alejandro Vilca, Natalia Morales y Gastón Remy a discutir cómo hacerle frente a la crisis y como impulsar en toda la provincia las ideas del FIT.

Ayer por la tarde en la Facultad de Humanidades de la UNJu, se realizó una primera reunión con decenas de jóvenes estudiantes de San Salvador de Jujuy, para debatir como organizarse para hacerle frente al ajuste del gobierno de Macri, el FMI y de Morales en la provincia con la complicidad del PJ. El problema de la precarización laboral y la crisis en educación fueron los temas más discutidos. De la reunión se salió con mucho entusiasmo para dar pelea contra los candidatos de los partidos patronales y convencer de una salida propia de la clase trabajadora, las mujeres y la juventud.

Alejandro Vilca abrió la reunión planteando: “todos los partidos patronales y el FMI tienen un acuerdo de que seamos trabajadores y jóvenes quienes paguemos la crisis. Desde el Frente de Izquierda estamos planteando una política para que esta crisis la paguen ellos, los empresarios. Las demandas de la juventud no existen entre esos partidos tradicionales, su plan es precarizar más a la juventud. Nosotros no, queremos que se sumen a fortalecer una fuerza política nueva, que de batalla contra los planes y políticas de los poderosos. Queremos hacer oír la voz de la juventud”.

Se plantearon muchos problemas que cruzan a la juventud en una provincia donde 9 de cada 10 jóvenes trabajan precarizados. Estudiantes secundarios plantearon que muchos de sus amigos y amigas de 15 años están teniendo que salir a trabajar en comercio o de mozos/as. Además, denunciaron que en las escuelas públicas hay un problema grande de que te obligan a pagar las coutas de cooperadora, que cada vez se vuelven más caras, como si fuese la cuota de un colegio privado. “Hay estudiantes que tienen que salir a trabajar para pagarla”, denuncio un estudiante del Colegio Provincial 3. También denunciaron la persecución que sufren quienes se organizan en los colegios por parte de las autoridades.

Frente a esa situación, Natalia Morales planteo que “la nueva juventud que se pone de pie es central para enfrentar esos planes y para llevar estas ideas a cada lugar de estudio, donde hay un rechazo enorme al gobierno y a la complicidad de todos los partidos tradicionales”.

“Si los partidos patronales no quieren que se oiga nuestra voz, tenemos que ser muchos más para que estas ideas lleguen a todas las familias, facultades, colegios y lugares de trabajo”, planteo Andrea Gutiérrez, estudiante de Letras y concejal por el PTS-FIT. Al finalizar, jóvenes ofrecieron sus casas como centros de organización en Alto Comedero o en el barrio Islas Malvinas. Esas muestras de apoyo militante son imprescindibles para el desarrollo de una campaña a pulmón, que se topa todos los días con el cerco de los medios hegemónicos. Esas fuerzas que se desarrollan por abajo son las que realmente pueden hacer temblar a los partidos patronales y sus planes.