Como si acompañara la inflación, el escándalo del espionaje ilegal sigue en ascenso. El nuevo protagonista se llama Rolando Barreiro, un ex espía de la AFI que tuvo vínculos estrechos con el falso abogado Marcelo D’Alessio.
En los últimos días Barreiro declaró ante el juez Alejo Ramos Padilla en el juzgado de Dolores y estableció una serie de definiciones. Allí volvió a implicar a las diputadas de la Coalición Cívica Elisa Carrió y Paula Oliveto.
Según las mismas fuentes, en las declaraciones el ex espía señaló que Oliveto pedía información sobre políticos de la oposición. Barreiro dedujo que esos datos serían para ser llevados ante Carrió.
Las dos diputada nacionales habían aparecido implicadas luego del primer informe que realizara Ramos Padilla ante la Comisión de libertad de expresión de la Cámara de Diputados. Allí ya había dado cuenta de las comunicaciones entre D’Alessio y Oliveto.
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