Así lo comunicaban en la noche de este viernes desde la Asociación de Personal de Plataformas. No es un caso aislado, trabajadores y trabajadoras de plataformas vienen denunciando las pésimas condiciones en las que deben trabajar para poder ganar unos mangos para sobrevivir.
La cara más brutal de la precarización
La muerte de Ramiro es el corolario de la precarización absoluta a la que las plataformas someten a sus trabajadores y trabajadoras. Decenas de pibes y pibas que laburan para estas aplicaciones han sufrido accidentes por responsabilidad de estas empresas, que no garantizan las medidas de seguridad necesarias para que desarrollen sus tareas.
Sin embargo, la muerte de Ramiro ocurre días después de conocerse un fallo que pone el ojo en las precarias condiciones de trabajo de los repartidores de empresas como Rappi, Glovo y PedidosYa. El juez Roberto Gallardo dictaminó que el Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta debía impedir el funcionamiento de estas empresas hasta que las condiciones de seguridad para sus trabajadores, tales como cascos, seguro y otras, estén garantizadas. Trabajadores y trabajadoras exigen que la empresa cumpla con el fallo y garantice todos los requerimientos que este impone, pero denuncian que la suspensión del funcionamiento de las plataformas los afecta de manera directa porque no pueden trabajar.
No pueden ser los trabajadores y las trabajadoras quienes paguen, incluso con su vida, la sed de ganancias de los empresarios, avalados por el poder político. Para ellos Ramiro es número más, para nosotros una nueva bandera de lucha contra la explotación y precarización de la juventud. Nuestras vidas valen más que sus ganancias. |