Para el martes 23 de abril la Dirección Nacional del Colegio de Profesores convocó a una jornada de protesta por el pago de la Deuda Histórica, la titularidad de las extensiones horarias, el pago de la mención para las educadoras diferenciales y de párvulos, transparencia en la pruebas de la evaluación docente, fin a la doble evaluación docente, entre otras demandas gremiales, según aparece sistematizado en la propia página oficial del organismo.
Si bien, todas las demandas apuntan a temas sentidos de la realidad que día a día vivimos muchos profesores, causa decepción y crítica que las principales luchas docentes nacionales que se están dando en este momento estén completamente ausentes para los dirigentes del gremio y que, al mismo tiempo, habiendo movilizaciones de profesores en curso, el Directorio Nacional opte por realizar una "protesta virtual". Con esto demuestran, nuevamente, no estar a la altura, cosa que ha sido la tónica de la dirección frenteamplista encabezada por Mario Aguilar (Partido Humanista).
Una conducción del Colegio de Profesores que no está a la altura de la situación política
Los tiempos mejores de Piñera no han traído descanso ni para los profesores ni para los estudiantes, ni para el resto del país. Con la supuesta desmunicipalización, eufemismo que solo oculta la creación de un nuevo intermediario (los servicios locales) entre el Mineduc, los municipios y los establecimientos, se ha generado un conflicto largamente anunciado y denunciado por amplios sectores docentes, incluyendo la Dirección Nacional, en base al cual el traspaso a estos servicios locales se realiza manteniendo cuantiosas deudas salariales y previsionales con los profesores sin que nadie responda por ello.
Ya el año pasado, en el caso específico de Barrancas, los docentes denunciaron esta situación e incluso votaron el Paro, mientras las direcciones nacionales y metropolitanas, encabezadas por Mario Aguilar y Carlos Díaz, respectivamente, se movieron aceleradamente terminando por bajar el paro y llamaron a confiar en un acuerdo sin garantías de las autoridades. En aquel momento desde Nuestra Clase planteamos la necesidad de sostener la movilización porque de lo contrario no habría resultados favorables, algo que hoy está a la vista.
Este año nuevamente en Barrancas se repite la misma historia, a la que se suman los servicios locales de Huasco y Araucanía Costa donde ya vienen votando movilizaciones y paros, como es el caso de Pudahuel, una de las tres comunas dependientes del Servicio Local Barrancas.
A esto se le suma la escandalosa persecución que el gobierno de Piñera viene realizando contra la juventud, nuestros estudiantes, graficado en los recientes allanamientos en las casas de los alumnos del liceo Darío Salas y su posterior detención, bajo acusación de homicidio frustrado cosa que luego la misma fiscalía desestimó por no existir pruebas que inculparan a los denunciados en los hechos ocurridos la tarde del jueves 18 de abril. Estos acontecimientos recordaron los peores episodios de la dictadura de Pinochet, esto en el marco de la cuestionada "Aula Segura" que como se puede apreciar no sólo no reduce la violencia, sino que está siendo utilizada para habilitar al propio Estado para ejercer violencia institucional por medio de sus agentes, tal cual como lo vienen haciendo desde hace años en la Araucanía contra los niños y niñas de las comunidades mapuche y sus familias.
Una política de criminalización hacia la juventud que se ve reforzada con iniciativas como la extensión "Control Preventivo de Identidad" y el "Toque de Queda para menores" propuesto por el sector de Kast, lo que también vuelve a traer a la memoria los tiempos de la dictadura. Como profesores debemos rechazar estas acciones de manera tajante y decidida, somos los primeros llamados a defender a nuestros estudiantes, no permitiendo que se mezclen los hechos acaecidos con personas externas al liceo, con los estudiantes inculpados por poseer ellos un perfil político. Por lo demás, sabemos que la violencia es un problema estructural de esta sociedad, que todas las injusticias y desigualdades son permitidas por los gobiernos de turno y clase empresarial, y que la solución por ningún motivo es la criminalización y medidas represivas contra las y los jóvenes.
Por otra parte, los profesores tampoco podemos quedarnos fuera de la polémica discusión sobre el TPP 11 , recientemente votado en la Cámara de Diputados, dándole la espalda al amplio rechazo que generó en distintos actores sociales para beneficiar a los mismos de siempre, hipotecando nuestros derechos y libertades para amarrar aún más nuestro país al capital internacional. Como se ha difundido de manera extensa, este nefasto acuerdo no solo viene a poner los intereses de las transnacionales por sobre nuestros derechos, sino que además viene a restringir el acceso a servicios tan básicos como la salud, la educación y la información.
Ninguno de estos temas tan importantes y delicados fueron tomados por la Dirección Nacional en la convocatoria a protesta nacional, reduciendo nuestra acción como profesores al mero reclamo gremial o sindical, lo cual va directamente en contra de asumirnos como profesores sujetos políticos de pleno derecho y en contra del rol del magisterio como un actor nacional relevante.
La insuficiencia de la protesta virtual
En segundo lugar, en esta movilización nuevamente la Dirección Nacional encabezada por Aguilar, del Partido Humanista y parte del Frente Amplio muestra sus límites. Esta conducción frenteamplista del CdP, lanzó un instructivo con el grandilocuente título de "protesta nacional" y, sin embargo, no contiene ningún llamado a paro serio, es más bien un reclamo virtual, llamando a posicionar un hashtag en twitter y a realizar performance en las escuelas, en momentos donde ya hay colegas movilizándose activamente y votando paro indefinido, como en los casos de las comunas de los servicios locales que se encuentran movilizados y el comunal de Valparaiso.
Hoy necesitamos pasar de la protesta virtual al paro nacional y a la movilización en las calles. Ya hay varios comunales que cuestionan esta situación, como en Antofagasta y Valparaíso donde están llamando derechamente a realizar un paro, ellos junto a los servicios locales de Barrancas, Huasco y Costa Araucanía nos están mostrando hoy un camino diferente al de la tibieza y la pasividad frenteamplista de la conducción de Mario Aguilar.
Los colegas que ya están en movilizaciones necesitan un Colegio de Profesores fuerte y solidario, que utilice las enormes posibilidades de su organización a nivel nacional para potenciar estas luchas, y que yendo más allá, sea una oposición real a Piñera, cuya agenda en educación no contempla más que reducción de fondos ocasionando el abandono de los liceos, el abandono de la educación pública para dejarla morir mientras que en otro ámbito implementa mecanismos de persecución a los estudiantes.
Es tiempo de dejar de lado la estéril estrategia de los acuerdos parlamentarios, que ha incluido desde el Frente Amplio a la ex Nueva Mayoría, responsables de la Carrera Docente y la creación de los Servicios Locales, y que incluía también a partidos golpistas como la DC que no dudan a votar en favor de los explotadores como quedó expresado en su votación frente a la reforma tributaria y el TPP 11, demostrando ser sólo papel mojado.
Es tiempo de volver a confiar en nuestras propias fuerzas movilizadas, las fuerzas de los trabajadores, de los estudiantes, del movimiento de mujeres, para ser una real oposición que obligue al gobierno a retroceder en su agenda, de recortes y ataques a la Clase Trabajadora, y nos permita retomar la iniciativa. |