Desde las primeras marchas contra los planes de Barnés, yo había llevado mi bandera de arcoirís-LBGTTTI. Iba con el miedo de que alguien me gritara o golpera por ser “puto”, pero no, conforme pasaban los contingentes había chavos y chavas que aplaudían o levantaban el pulgar y algunos gritaban “ese apoyo si se ve”…
Muchos se acercaron a preguntar si representaba alguna organización o grupo, yo simplemente les decía que también era estudiante y que en este movimiento teníamos que estar, que la universidad tenía que mantenerse pública, gratuita y diversa.
Después de iniciada la huelga fui conociendo más chavos y chavas que estamos apoyando en nuestras respectivas escuelas y facultades, muchos aun en el closet. Había compañeras lesbianas y compañeros gays de química, psicología, derecho, ingeniería, prepas y CCH’s., estábamos en todas partes.
Yo iba en CCH-Vallejo y el 29 de mayo de 1999 formamos el Grupo Universitario por la Diversidad Sexual llamado GUDS-UNAM. Este grupo existió hasta después de la huelga como espacio de reflexión sobre la universidad y nuestra identidad.
*Un testimonio de la participación de la diversidad sexual en tan importante proceso histórico en defensa de la gratuidad universitaria. | 
