Por estas horas, mucho se está hablando de Elisa Carrió. En el medio de su crisis, el macrismo apostó a darle un perfil alto para ver si puede remontar la campaña electoral.
Pero las cosas no vienen saliendo bien. Primero, la diputada dijo en Córdoba que “gracias a Dios, murió De la Sota”. Generó un escándalo nacional y le restó al Gobierno, más que sumarle.
Horas después, mientras subían el dólar y el riesgo país, fue abordada por una persona que le recordó cuando el año pasado prometió que la divisa norteamericana se mantendría en $ 23. Por esas horas, ya andaba por casi $ 45.
Estando en el centro de las críticas, finalmente la diputada decidió responder de forma risueña desde las redes sociales. Al fin y al cabo, nada extraño, con esta seriedad se toma Cambiemos la crisis que afecta a las grandes mayorías. Aunque ridículamente quiso adjudicar las críticas al kirchnerismo, el repudio se lo ganó de gran parte de la población.
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