De acuerdo a lo informado por el portal Sudestada, la Fiscalía de DDHH ordenó el allanamiento del genocida luego de la “entrevista” que le hizo a éste el diario El País. Se informa que se incautaron “biblioratos” y “varias cajas con documentación”, el allanamiento fue autorizado por el juzgado letrado de 7º turno de Ciudad de la Costa.
El material incautado se trasladó al juzgado penal de 29º turno, que posee el expediente de la denuncia de las 28 ex presas políticas en 2011. La denuncia refiere a múltiples violaciones de los DDHH por parte de Gavazzo y otros represores de la dictadura.
Según las autoridades judiciales este procedimiento tiene el objetivo de comprobar si hay información relevante para las causas abiertas que implican a Gavazzo en estos momentos. Es un escándalo que hasta ahora (luego de varias décadas) tuviera información de inteligencia y que al poder judicial no se le haya ocurrido hasta hoy indagar sobre ello. Esto también es una muestra de la impunidad y la libertad que gozan, 35 años después se acordaron de que tenían que hacer esto básico.
El torturador y genocida Gavazzo goza desde hace años del beneficio de la prisión domiciliaria y recientemente se le había incluso concedido el no uso de la tobillera electrónica, medida que posteriormente retrocedió. Los amplios ejemplos de impunidad como este son razones suficientes para que se les quiten todos sus privilegios y que se los mande a él y otros represores a una cárcel común.
También hace pocos días organismos de DDHH organizaron una vigilia en la puerta de su casa para denunciar las condiciones de privilegio de que goza el genocida y pidiendo cárcel común para todos los represores de la dictadura. | 
