El Muncipio de Julio Garro no respetó sus derechos. Ella, junto a las abogadas del CeProDH, llegó al máximo tribunal con su reclamo, La sentencia en su favor sienta un gran precedente para futuros casos. Mirá el fallo.
En el día de ayer se dio a conocer un fallo de la Suprema Corte de Justicia de la provincia de Buenos Aires que dispuso la reincorporación de Valentina Pereyra como trabajadora municipal transexual, despedida de forma discriminatoria por la Municipalidad de La Plata en diciembre del año 2015.
La sentencia hizo lugar al recurso de inaplicabilidad de ley interpuesto por Valentina, con el patrocinio del Centro de Profesionales por los Derechos Humanos, y se funda “en la obligación de cumplir el cupo legal de trabajadores trans en el sector público de la Provincia”.
Desde La Izquierda Diario entrevistamos a María Luz Santos Morón, abogada de la causa y referente del CeProDH.
¿Qué significa para la lucha por el cupo laboral trans esta sentencia?
Es una sentencia muy importante. Ya nosotros en el año 2016 conseguimos esta medida cautelar por parte del Juzgado Contencioso Administrativo de primera instancia n° 4 de La Plata y con posterioridad, después de haber logrado la reincorporación de Valentina, la municipalidad apeló esta medida a la Cámara de Apelaciones. La cámara le dio la razón a la Municipalidad revocando la reincorporación y por eso nosotros, atendiendo a que afectaba derechos elementales, como el derecho y el acceso al trabajo, el principio de no discriminación y el derecho a la igualdad, recurrimos ante la Suprema Corte porque considerábamos que pese a que se trataba de una medida cautelar y no una sentencia definitiva, esto le generaba un gravamen irreparable a Valentina pero que además el fallo de Cámara sentaba un precedente nefasto y discriminatorio para las personas trans, quienes desde el año 2015, en la provincia de Buenos Aires se encuentran amparadas por la Ley de Cupo Laboral Trans que es la 14.783.
Llegamos a la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires y tardó años en expedirse pero lo hizo en esta oportunidad, sentando un precedente muy importante donde se revoca esa medida de la Cámara y se reconoce que fue bien otorgada la medida cautelar de reincorporación de Valentina como trabajadora municipal en la ciudad de La Plata que había sido injustamente despedida por el gobierno del intendente Garro y que esto había implicado un acto discriminatorio por parte de la Municipalidad.
¿Qué rol juega el CeProDH en esta causa?
Desde el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (CeProDH) patrocinamos a Valentina en esta pelea pero además nos pusimos a la cabeza de poner en pie la campaña por el cupo laboral trans junto con otras personas trans, comisiones de mujeres y diversidad y otros colectivos para reclamar que efectivamente la Ley de Cupo Laboral Trans se implemente en todas las dependencias del Estado de la provincia de Buenos Aires y para exigir mejores condiciones laborales, teniendo en cuenta la precariedad que padecen las personas trans en el ámbito laboral y las dificultades que tienen a la hora de acceder a un trabajo formal.
Es parte de una de las tantas batallas que damos desde el CeProDH en defensa de los trabajadores, de las mujeres, de la diversidad sexual, de la juventud cuando se ven afectados los derechos y las libertades democráticas por parte del Estado y de las patronales.
Esta sentencia no se da en cualquier marco, sino donde hay cada vez más despidos y ajuste para la clase trabajadora, ¿opinás que es una gran precedente para la clase?
Si, desde ya. Porque además de hablar de la ley de Cupo Laboral Trans la cual debe ser cumplida, habla de lo que implican los despidos discriminatorios y cómo debe actuar la justicia, ordenando la reincorporación cuando esos despidos son debido a una persecución por cuestiones ideológicas, sindicales, cuestiones de sexo, identidad de género, raza, etc. Es muy clara en ese sentido, de hecho menciona varios de los precedentes, uno de ellos también conseguido por el CeProdh hace ya un tiempo, donde se ordenó la reincorporación del trabajador Franco Villalba y se vuelve a retomar en esta sentencia marcando claramente que, ante despidos que son persecutorios o discriminatorios, se afectan los derechos elementales como el derecho al trabajo, el carácter alimentario del salario, el derecho en este caso a acceder a un trabajo en condiciones dignas y que se respete la ley de cupo laboral trans .
Es decir que sirve como punto de apoyo para defender a trabajadores y trabajadoras que son despedidas de manera discriminatoria y persecutoria cuando las patronales utilizan este tipo de despidos para disciplinar al conjunto de la clase trabajadora.
¿Cuál es la situación actual en cuanto a la reglamentación del cupo?
Actualmente no se ha reglamentado la ley en toda la provincia de Buenos Aires pero venimos dando una pelea en este sentido y es muy importante para que el Estado no tenga ninguna excusa y lo tenga que implementar en todas las dependencias estatales porque precisamente la falta de reglamentación es el argumento que utilizan, por ejemplo algunos municipios o algunas dependencias estatales para no implementarlo efectivamente. Por eso pese a que hace 4 años que esta ley fue sancionada, esa igualdad ante la ley o ese reconocimiento de un derecho positivo de la ley, sigue implicando la desigualdad ante la vida.
Sin embargo entendemos que en los lugares en los que no hay reglamentación esto no puede ser un límite, la ley es muy clara de cómo se debe cumplir el porcentaje de cupo laboral trans y además establece como principio la no discriminación, un principio que además está reconocido en tratados de derechos humano tanto a nivel de Naciones Unidas como de la OEA y es una pelea que hay que seguir dándola en este marco para que se reconozca este derecho, teniendo en cuenta que el 80% de las personas trans se encuentran en situación de prostitución o con trabajo en condiciones de precariedad laboral y de mucha inestabilidad, lo cual genera una vulneración y una situación de doble opresión y explotación.
A nivel nacional, según datos de 2014, solo el 18% de las personas travestis y trans habían accedido a un trabajo formal. Además, al menos el 80% está o estuvo en situación de prostitución -como un destino al que conducen las distintas formas de exclusión, que culminan en un promedio de vida de 35 años-. Según datos del INDEC, 7 de cada 10 quiere otra fuente de ingresos.
La demanda del cupo, además está íntimamente ligada a ley de identidad de género. Y en esta situación, además del acceso al trabajo, también a las personas trans se las excluye del sistema educativo y de salud pública.
¿Cómo se entiende que con leyes de avanzada aún estos derechos sean sistemáticamente vulnerados? Esto está completamente ligado al rol que juega la Iglesia reaccionaria que históricamente ha estado y está en contra de los derechos de las mujeres, las disidencias y la diversidad sexual, ademas por sus vínculos económicos con todos los gobiernos de turno, se cuela en instituciones como el Congreso como vimos con la votacion por el aborto legal y la falta de presupuesto que se destina por parte del Estado.
Desde las organizaciones de mujeres y disidencias, a partir de la pelea por la reincorporación de Valentina en la región, se han hecho distintas acciones para visibilizar esta demanda y pedir además el acompañamiento de los sindicatos. En La Plata, comisiones de mujeres como las de Desarrollo Social y el IOMA, han hecho y siguen en pie, campañas para que el cupo laboral sea efectivo. Es así, que además de tener iniciativas con los cambios registrales acordes a la ley de identidad. En IOMA los y las trabajadoras actualmente se organizan por el pase a planta de una persona trans, que desde hace un año desempeña tareas en el organismo sin que su expediente haya sido tratado acorde a la ley Diana Sacayan.
En este sentido, Natalia Litterini, trabajadora de IOMA, delegada de la agrupación Marrón ATE, secretaria de género y diversidad e impulsora de la Campaña por el Cupo Laboral Trans manifestó a La Izquierda Diario que “deberían estar trabajando alrededor de 25 personas trans por la capacidad de planta del IOMA en toda la provincia. Si eso fuera llevado adelante de conjunto por todos los organismos públicos, ¿acaso no cambia radicalmente la situación? Desde Pan y Rosas confiamos en la fuerza de esta marea verde y de que este año La Plata haga sentir fuertemente este reclamo, siendo la sede del 34 Encuentro Plurinacional de mujeres y disidencias.”
Para que la igualdad ante la ley, sea la igualdad ante la vida hay que organizarse en cada lugar de estudio y de trabajo, en comisiones que acompañen esta lucha, que es ni más ni menos por una vida que merezca ser vivida.
Sabemos que nuestros derechos los conquistamos con la lucha y organización, pero en el marco de las políticas de ajuste que se vienen implementando esta lucha debe necesariamente ligarse con un programa anticapitalista que plantee la ruptura con el FMI, que vacía la salud y educación pública, y vulnera los derechos de trabajadores y trabajadoras.
