Con el correr de los días, el espacio que pretende ser la tercera opción entre macrismo y kirchnerismo se deprecia. Una cumbre que no fue tal y y el llamado a Tinelli a competir en las PASO de ese espacio.
El lanzamiento de la fórmula Fernandez-Fernandez provocó un verdadero terremoto político y dejó boquiabierto a más de un pre candidato, o con ilusiones a serlo, y sus respectivas fuerzas políticas.
Es prematuro aún saber si esta apuesta tendrá los resultados esperados para el kirchenrismo. Está por verse aún si los Fernández logran convencer a Massa, a quien llamaban "traidor" hace apenas un tiempito nomás, de que abandone a Alternativa Federal a cambio de un buen puesto, como se rumorea que podria ser la gobernación de la provincia de Buenos Aires.
Lo que sí ya es un hecho es que la figura de Alberto Fernández le quita espacio político (y votos por supuesto) y acelera la crisis e incertidumbre dentro de ese espacio. Por lo pronto ya varios gobernadores, que se referenciaban en ese sector, se sumaron a la iniciativa kirchnerista.
Crónica de un rosca devaluada
Lo que prometía ser la “cumbre” del peronismo federal, desde donde saldría una definición electoral, terminó devaluándose con el correr del día. Y el “Día D” se transformó en una jornada deslucida, sin información clara, y cuyo mensaje más claro fue el llamado, a través de un video de Schiaretti, a Marcelo Tinelli y Daniel Scioli, a presentarse en las PASO de ese espacio. Si eso no es la expresión de un espacio devaluado y que mendiga candidatos, ¿qué es?
Por la mañana temprano, el día comenzó con la noticia de que la rosca había comenzado el día anterior. Massa, Schiaretti, Urtubey, y Pichetto se reunieron a cenar en la casa del ex intendente de Tigre, para confirmar la adhesión a ese espacio y ratificar la necesidad de dirimir la figura presidencial en las PASO.
Unas horas antes, Schiaretti, que fue reelecto en Córdoba con un importante caudal de votos en parte gracias a que el kirchnerismo resigno su candidato para apoyarlo, tuvo una agenda recargada en la que se hizo de tiempo para encontrarse con Macri y Lavagna por separado.
A media mañana se difundió que el encuentro federal sería al mediodía y sin Lavagna, quien había tenido diferencias con Schiaretti por su negativa a participar en las PASO y favor de ser “el candidato del consenso”.
Finalmente, a la hora señalada, lo que se difundió fue un video en el que Schiaretti hace un llamado explícito a Daniel Scioli y Marcelo Tinelli. “Alternativa Federal tiene la enorme posibilidad, junto a otras fuerzas como puede ser el socialismo, el GEN, o como otras figuras que manifestaron su voluntad de construir un espacio de estas características, como Daniel Sciolli y Marcelo Tinelli y tantos otros. Para ello, los que pretenden ser candidatos deben presentarse en las PASO y ahí eligiremos el candidato”, dijo el cordobés.
Al cierre de esta nota se conoció la respuesta de Daniel Scioli : "siento un gran orgullo por la invitación que me hizo Schiaretti, ya que es un hombre de valores que comparto y con un perfil productivista como el que yo impulso". ¿Habrá aceptado el convite a participar de las PASO federales?
Y un rato después se conoció una foto de los cuatro dirigentes (Massa, Urtubey, Schiaritti y Pichetto) con cara de felicidad, celebrando la firma no se sabe de qué acuerdo.
La “tercera vía” que quiere representar el peronismo federal y Lavagna cada vez esta más devaluada y desdibujada. Es que sus límites son difusos. Lavagna, por un lado, promueve una alianza con Stolbizer, el socialismo de Lifschitz y hasta con el sector más crítico del radicalismo dentro de Cambiemos, que encabezan Federico Storani y Ricardo Alfonsín. Schiaretti, como ya venimos denunciando desde este medio, se define como un “amigo” de Macri y mantiene varios puntos de acuerdo con la política de ajuste y sumisión al FMI del Gobierno nacional, pero a su vez fue apoyado por el kirchnerismo en las elecciones provinciales. Y por último, Massa que si bien se mantiene formalmente dentro del espacio todavía, podría dar un paso al costado para caminar junto a los Fernandez, espacio desde el cual lo han interpelado varias veces, no sólo Alberto Fernadez, sino hasta importantes dirigentes el kirchenerismo.
Sin embargo, hay algo que los une. Y es que ninguna de estas opciones políticas cuestiona la subordinación del país a los mandatos del FMI. Razón por la cual, para todos ellos hoy es más importante pagar la deuda, que las necesidades de los niños (de los cuales la mitad son pobres), jóvenes, trabajadores, mujeres y jubilados, a quienes se les hace cada vez más difícil llegar a fin de mes, pagar las tarifas de los servicios públicos (que deberían ser un derecho y son un gran negociado) y mantener un trabajo.
Solo el Frente de Izquierda plantea no pagar la deuda externa para atender las necesidades de la población.