La historia se centra en un adolescente que se niega a seguir los pasos de su padre quien es un Mara’akame (chamán), el joven sueña con ser una estrella del escenario musical pero un viaje a la Ciudad de México le hará encontrase a sí mismo.
La película El sueño del Mara’akame (México, 2016) dirigida por Federico Cecchetti, destaca por estar hablada en lengua huichol del pueblo originario Wixárika, además que nos presenta un poco de su mundo y tradiciones que han mantenido por décadas.
El filme de Cecchetti fue producido en el programa de Óperas Primas del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) de la UNAM, su estreno comercial se hizo en circuitos culturales. Obtuvo en 2017 el premio Ariel por Mejor Ópera Prima y el Ariel por Mejor Música Original.
En una comunidad indígena, ubicada en el estado de Jalisco, vive Nieri (Lucíano Bautista) un adolecente wixárika hijo de un Mara’akame (chamán) por ello su destino será resguardar las tradiciones y rituales de su pueblo.
Pero el joven quiere seguir en el grupo musical de sus amigos para interpretar cumbias, a lo cual se opone el padre quien lo obliga a seguir en las labores del campo y en las artesanías además de que tiene que aprender los rituales.
Un inesperado viaje a la Ciudad de México es aprovechado por Nieri para asistir al concierto de sus amigos. El periplo del chico wixárika significará un reencuentro con sus raíces, esto en medio de sueños donde la realidad y la fantasía se confunden.
En la cinta se presenta el uso del peyote en rituales tanto indígenas como de personas que pagan por alguna experiencia mística, así como los problemas y acoso que sufren los huicholes al transportar este cactus que es sagrado para ellos.
El sueño del Mara’akame pone en el escenario público al pueblo Wixárika el cual ha librado luchas en defensa de sus territorios contra la ambición de las mineras extranjeras. Como muchas películas mexicanas la ópera prima de Cecchetti ha tenido que esperar mucho tiempo para su estreno pero esto no le quita fuerza.