El Tribunal cuestionado por familiares, amigos y organismos de Derechos Humanos, integrado por los jueces José María Escobar Cello, Luciano Lauría y María Ivón Vella, condenó a Rodolfo Valentino Cóceres y Rodrigo Ismael Sosa, de 26 y 22 años, como "coautores del delito de homicidio agravado por haber sido cometido con alevosía y para procurar impunidad". Prisión perpetua, sin salidas.
Luego de dictada la sentencia, Marina Destéfanis, hija de Silvia Suppo, dijo a la Izquierda Diario: “Realmente estamos muy impactados por la condena. Por un lado, porque no es lo que hubiésemos querido y por otro, estos chicos no son los responsables máximos del asesinato.
Esta condena es para mantener y garantizar la impunidad de los responsables más altos. Estamos muy preocupados porque hoy se habló de un crimen común como móvil del asesinato y lo que nosotros venimos sosteniendo desde un principio, es que se trató de un asesinato político por la condición de testigo y querellante de Silvia”. Y agregó: “Respecto al rol de la policía, corrieron traslado a la fiscalía en el fuero federal, por lo que nuevamente tenemos que constituirnos en querellantes, en otra batalla judicial, pero nosotros queremos realmente avanzar para determinar la mecánica, el verdadero móvil y la estructura que hicieron posible el asesinato”.
Amigos de represores integran el Tribunal
En 2011 fue necesaria la intervención de la Corte Suprema de Justicia de la Nación para que la causa pasara a la justicia federal con la orden de investigar la hipótesis de asesinato político por encargo. Ante la negativa de todos los jueces intervinientes, el 16 de diciembre de 2014, apresuradamente, se elevó a juicio oral una parte de la causa sin ninguna medida investigativa y con sólo dos de los imputados autoincriminados. El nuevo Tribunal es integrado por el juez Luciano Lauría, repudiado y rechazado por todos los organismos de derechos humanos de la provincia y por la querella, por ser amigo de Victor Hermes Brusa, quien fuera condenado a la cárcel el 22 de diciembre de 2009, gracias al testimonio fundamental de Silvia. Tres meses después, fue asesinada.
Los familiares y amigos de Silvia, denuncian que hicieron varios pedidos de nulidad tras la parcialidad que decide dejar de lado la hipótesis del crimen por encargo. El Tribunal que acaba de dictar prisión perpetua a los jóvenes autoincriminados, se rehusó a investigar las múltiples irregularidades en el accionar policial, ahondar en la inconsistencia de los testimonios que defienden la hipótesis de robo y reconstruir la escena del crimen.
El 29 de Marzo, a 5 años del asesinato político, un comunicado de prensa del Espacio Verdad y Justicia por Silvia Suppo, denunciaba: “Desde diciembre de 2014 se está desarrollando un juicio con el que no estamos de acuerdo porque se elevó solo una parte de la causa. Se está juzgando como homicidio en ocasión de robo a dos de los imputados, sin siquiera iniciar seriamente la investigación del crimen político. Además, este juicio puede ser anulado y dejado sin efecto por la Cámara Federal de Casación Penal y por la misma Corte Suprema de Justicia de la Nación”.
En relación a las enormes y graves irregularidades cometidas el comunicado afirmaba: “Inmediatamente después del hecho, comenzó la persecución y detención ilegal en los barrios más estigmatizados de la ciudad a la pesca de un culpable. Uno de los jóvenes detenidos ese día declaró que sufrió torturas, lo asfixiaron con una bolsa y le quebraron el tabique buscando que se haga cargo del robo y del asesinato. La mayoría de los allanamientos fueron ilegales con policías de civil y sin orden judicial. En la casa de Sosa la policía estuvo toda una noche hostigando a la familia, a la espera de Sosa y Coseres, pidiendo que los entreguen. Estos hechos dejan a las claras la participación policial en el encubrimiento”.
“La misma policía que encubrió el asesinato de Silvia y la desaparición de Julio López, la misma policía que asesinó a Luciano Arruga, a Pocho Lepratti, que mató a Patóm, Mono y Jere, es la que el 7 de diciembre del año pasado se cobró la vida del joven rafaelino Adrián Pacheco en una persecución que termina con su cuerpo sin vida en el canal norte, hecho que aún no se ha investigado y ni siquiera se ha constituido como una causa judicial. Esta policía que hoy persigue a los pibes y pibas de nuestros barrios, es la misma que tranza con narcos y proxenetas, gozando siempre de total impunidad”.
Cómo sigue
Los jóvenes Rodolfo Valentino Cóceres y Rodrigo Ismael Sosa recibieron una condena que muchas veces, ni a los genocidas se les dicta. El reclamo por una investigación real sigue vigente. En el fuero federal continúa ahora, otra parte de la causa que investiga el accionar de una veintena de policías de la Ciudad de Rafaela, incluido el actual Secretario de Seguridad de la Municipalidad de Rafaela, Juan José Mondino. Como denuncian familiares y amigos de Silvia Suppo: “Terrible absurdo”.
Mientras tanto, junto a la familia, numerosas organizaciones de derechos humanos, sociales y políticas santafesinas, seguiremos en las calles reclamando y exigiendo, justicia. |