Después de haber confirmado su pase definitivo a las filas del oficialismo, Miguel Ángel Pichetto se quedó solo en el Senado. O casi solo. Este jueves, algunos medios de comunicación informaron que ya está buscando compañeros y compañeras de bloque en la Cámara Alta. Los nombres que suenan evocan el tren fantasma.
El primero que salta a la vista rápidamente es el del ex presidente Carlos Menem. El hombre que pasó a la historia por haber hundido al país, privatizando los servicios públicos, dejando un tendal de desocupación y desguazando la riqueza nacional para conformar al capital imperialista.
En ese mini-bloque también estaría con Pichetto Carlos “Lole” Reutemann. El ex corredor de Fórmula 1 fue gobernador de Santa Fe. Allí aplicó las políticas de ajuste y privatización del menemismo. Desde 2015, a tono con gran parte del peronismo, ha sido un aliado de hierro de Macri a la hora de avalar políticas de ajuste.
Según las versiones periodísticas, completarían el rejunte Lucía Crexell, legisladora oriunda de Neuquén y el peronista correntino Camau Espínola. Ninguno de los dos tiene una veta progresista para mostrar.
Miguel Ángel Pichetto fue la principal espada parlamentaria del kirchnerismo en el Senado. Durante más de una década garantizó ahí múltiples leyes. En su currículum hay que anotar el aval a la Ley Antiterrotista, norma impulsada por el gobierno de EE.UU. y votada por la bancada kirchnerista de conjunto.
En estos tres años y medio de gestión macrista fue un un gran aliado del gobierno nacional, uno de los pilares de que las políticas de ajuste pasaran por el Senado. Sin embargo, a pesar de eso, nunca fue expulsado del PJ.
Hasta hace apenas semanas Pichetto era parte de un armado común con Sergio Massa, la flamante incorporación al Frente por Todos. Con el ex intendente de Tigre comparten una mirada abiertamente punitivista contra los sectores más humildes de la población.
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