La última encuesta del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), muestra que en el 2018 creció el empleo no registrado, el 81,7% de los trabajadores en negro tiene empleo de baja calidad y un 75,9% no recibe aportes de seguridad social.
Además en los últimos años siguió aumentando la proporción de ocupados en el sector micro informal de la estructura productiva (actividades laborales autónomas no profesionales o llevadas a cabo en pequeñas unidades productivas de baja productividad, alta rotación y baja o nula vinculación con el mercado formal).
Según el informe de la UCA, a finales de 2018 los ocupados en el sector público representaban el 14,9% (se incluye tanto a los empleados que cubren las necesidades operativas del Estado como a los trabajadores que contraprestan en los programas de empleo directo), y solamente el 35,8% de los ocupados realizaban actividades en el sector privado formal (actividades laborales profesionales o en unidades económicas de media o alta productividad e integradas a los mercados formales).
Trabajo no registrado, precario y desocupación
La semana pasada se dieron a conocer las cifras del desempleo medidas por el INDEC, que mostraron el récord del 10,1%, que no sucedía desde el 2006.
Pero la precarización, el trabajo no registrado y la desocupación no son nuevos.
Desde hace años desde el PTS/FIT denunciamos y acompañamos las luchas contra los despidos, cierres y todas las formas de precarización laboral. Además planteamos la urgente necesidad de romper con el ajuste del FMI, Macri y todos los gobernadores que sólo tiene más miseria para los trabajadores y el pueblo pobre.
El no pago de la deuda es fundamental para que la plata vaya para salarios, trabajo, salud, educación y vivienda, no para el Fondo Monetario Internacional.
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