Luego de una reunión en la secretaría de minería e hidrocarburos de la Provincia entre los miembros de la Comisión Directiva, delegados y el representante legal junto a directivos de la compañía minera Aguilar las partes no llegaron a un acuerdo.
“Hablamos y no llegamos a ninguna solución, hay una posición muy intransigente de ambas partes pero nosotros la vamos a mantener”, afirmó Carlos Trejo, secretario general del sindicato AOMA.
El reclamo de los mineros es por la falta de condiciones de seguridad laboral que los expone a situaciones de riesgo de vida, como también denuncian un vaciamiento por la falta de materiales de trabajo, inversiones en seguridad y reducción de personal en algunas áreas.
Minera Aguilar pertenece al grupo Glencore que viene de cerrar en enero su planta de fundición en Palpalá dejando en la calle a 144 familias y para ello contó con el apoyo del gobierno a través del ministerio de Trabajo Provincial.
A su vez, Glencore es un gigante mundial obtuvo una ganancia de U$S 8.300 millones durante el primer semestre de 2018, un 23 % más que en el mismo período de 2017. Este grupo emplea a 158.000 trabajadores y contratistas, operando en 50 países y produciendo más de 90 productos, entre metales, minerales, carbón, petróleo, negocios agrícolas como granos, productos oleaginosos, legumbres, algodón y azúcar.
Sobre esta compañía fundada en 1974 por Marc Rich, comerciante belga-estadounidense, recaen sobre sus espaldas denuncias de prácticas antisindicales, abusos laborales y ambientales, discriminación a los trabajadores como también hechos de corrupción en sus negocios.
Como contraste, el apoyo que recibieron los mineros y sus familias en el trayecto por la ruta 9 de distintas localidades como el que tuvieron al llegar a San Salvador ha sido muy amplio. La solidaridad es clave ante un reclamo que de triunfar puede fortalecer a los trabajadores en un momento muy delicado donde las patronales vienen descargando la crisis sobre los trabajadores.
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