Ramón Segovia trabajó en Mercedes Benz desde noviembre de 1974 hasta diciembre de 1993. Fue delegado clasista en la fábrica y militante del Partido Socialista de los Trabajadores en los 70.
La semana pasada brindó su declaración en el marco de la causa judicial que investiga crímenes de lesa humanidad en esa multinacional. Allí describió la responsabilidad de la empresa en los secuestros, desapariciones de sus compañeros y los aportes económicos que entregaban a la dictadura. Contaban para esto con la colaboración de la burocracia del SMATA.
Con las declaraciones de los testigos vuelve a manifestarse la responsabilidad de los ejecutivos de la Mercedes-Benz en el genocidio
Sí, está comprobada la responsabilidad de la empresa y los aportes económicos que hacía Mercedes-Benz a la dictadura con dinero y las unimog. Hasta donaron un equipo de neonatología al Hospital Militar de Campo de Mayo para los nacimientos en cautiverio en 1975. Los ejecutivos de Mercedes-Benz les dieron los datos a los represores.
En este juicio no hay empresarios que estén siendo juzgados
La impunidad que mantiene la Justicia, sobre todo para los empresarios, está clara. Hacen muy largos los procesos. Esta es la quinta vez que declaro en esta causa. Más allá de la condena a los dos ex gerentes de Ford que es muy importante, muchos empresarios y represores ya se murieron impunes.
En su declaración explicó el rol del SMATA en la fábrica durante la dictadura. El actual secretario general del SMATA, Ricardo Pignanelli entró a Mercedes Benz en 1977, ¿hizo algo por los desaparecidos?
Pignanelli fue mi subdelegado después del 77. Era un militante, sin que nosotros lo supiéramos, de la Verde de José Rodríguez y después militó abiertamente en esa lista. Él era de la burocracia, era una especie de infiltrado.
Nunca hizo nada por nuestros compañeros desaparecidos de Mercedes. Es más, José Rodríguez está acusado no sólo de no hacer nada por los compañeros, si no que se quedó con la plata que la FITIN aportó para las familias de los desaparecidos de Mercedes.
Rodríguez no sólo fue cómplice de la dictadura y de la empresa si no que se robó la plata que era para las familias. Esa es la burocracia sindical que tenemos hoy y Pignanelli es el reflejo de José Rodríguez
¿Qué mensaje dejarías a las nuevas generaciones?
Para las futuras generaciones, para los compañeros, querría dejar un humilde pero fuerte mensaje. Tenemos que seguir luchando, contra la persecución que continúa siempre a los delegados que son opositores a la burocracia sindical. Esta burocracia fue cómplice de la dictadura y actuaron en conjunto marcando a los compañeros. Así pasó en Mercedes-Benz y tantas otras fábricas.
Con la dictadura lograron una victoria parcial, pero los trabajadores tenemos una fuerza enorme para seguir luchando y revertir la situación que imponen las patronales con la colaboración de la burocracia. |