El País
“La renuncia de Urzúa evidencia el mando personalista de López Obrador” tituló. Resalta el fortalecimiento del presidencialismo en México con el nuevo gobierno, cuya legitimidad permitió recomponer el conjunto de las instituciones de la democracia para ricos, que atravesaban una profunda crisis luego de la masacre de Iguala y la desaparición forzada de los 43 normalistas de Ayotzinapa en 2014.
Según este periódico del Estado español, “La marcha de Urzúa es significativa en tanto era uno de los miembros moderados de su Gabinete sobre los que López Obrador construyó su perfil más pragmático, que le permitió ganar la presidencia de México de forma arrolladora hace un año. Su continuidad en el Gobierno como máximo responsable de la economía mexicana resultó una garantía y un cortafuegos no solo con los mercados, sino con el mundo económico y empresarial, de donde provienen los mayores críticos con López Obrador desde siempre.”
Hacen énfasis, como muchos medios, en que Urzúa era “la figura que atemperaba a los mercados y a los empresarios, aunque con los meses fue perdiendo influencia.”
Señala también el reconocimiento de López Obrador de que el ex secretario de Hacienda y Crédito Público tuvo diferencias con Alfonso Romo, el secretario de la presidencia, en torno a la banca de desarrollo y con él mismo por el diseño del Plan Nacional de Desarrollo.
Asimismo, señala que las promesas de cambio de López Obrador, cimentadas en el combate a la corrupción, chocan de frente con las denuncias de Urzúa en su carta, donde denuncia que hay conflicto de interés de algunos altos funcionarios.
El Mundo
Tituló “El exceso de austeridad abre grietas en el Gabinete de López Obrador”. Destaca que la dimisión “evidencia la falta de confianza de importantes funcionarios del país con respecto a la revolución prometida por el presidente mexicano”.
Financial Times
“Ministro de Hacienda mexicano renuncia por diferencias con el presidente de izquierda” encabezó. Una lectura a todas luces impresionista de un gobierno que de izquierda no tiene nada, como muestra el plan de austeridad republicana, centrado en el despido de trabajadores estatales de todas las dependencias y el recorte presupuestario a gasto social, como salud y educación.
El medio británico destaca “El ex profesor de economía había sido visto por los mercados financieros como un garante de la prudencia fiscal y su salida se produce a medida que las perspectivas para la economía de México se oscurecen, con una desaceleración abrupta del crecimiento y una baja en la calificación de las agencias calificadoras.
A su vez, señala que uno de los desacuerdos de Urzúa en el gabinete presidencial era sobre la viabilidad del proyecto de la nueva refinería de $ 8 mil millones y medidas de rescate para Petróleos Mexicanos (Pemex).
Recuperan las declaraciones de Gustavo de Hoyos, líder de la Confederación Patronal de la República Mexicana, quien lamentó la partida del secretario. “Estamos preocupados por estas denuncias de visiones extremistas y decisiones sin sustento de la gestión pública y la denuncia de conflictos de intereses" en el gobierno, tuiteó. “Exigimos certeza y estado de derecho”.
Por último, citan declaraciones de Shamaila Khan, jefa de estrategias de deuda de mercados emergentes de AllianceBernstein, una administradora de fondos, quien afirmó la salida de Urzúa era “preocupante. "Los ingresos están bajando, el gobierno todavía parece estar priorizando los proyectos que no son necesarios, y el entorno empresarial sigue siendo incierto", expresó. No obstante, destacó que López Obrador "sigue gozando de una gran popularidad y es probable que tenga que ver mucho más rechazo de los mercados financieros para diseñar un cambio en la política pública".
The Economist
“El ministro de finanzas de México se cae con su presidente populista” tituló, que también califica al gobierno de López Obrador como de izquierda, otra lectura errónea.
Enfatiza que la posición de centro, o más conservadora, de Urzúa en materia económica, "no encontró eco" en el gobierno y cita a Luis Rubio, del Centro de Investigación para el Desarrollo (CIDAC): "Nunca había visto una carta como esta en México".
El medio británico enumera renuncias previas de mandos altos y medios del gobierno de López Obrador, pero sostiene “La partida del señor Urzúa va a doler más. Atenúa el aura de un presidente que todavía tiene altos índices de aprobación. Expone luchas internas dentro de su equipo. Hará más difícil la gestión económica en un momento en que el crecimiento y la inversión están fallando.”
Señala, asimismo, “Se cree que el Sr. Urzúa se opuso a un plan del gobierno para forzar una renegociación de los contratos de gasoductos con una empresa de energía canadiense que el gobierno anterior había firmado. El plan dañó la confianza de los inversionistas en México.”
Y, al igual que el Financial Times, considera que “La mayor fuente de tensión probablemente fue Pemex, la compañía petrolera estatal en crisis. Pronto presentará un plan para lidiar con su deuda de $ 100 mil millones. El ministro de finanzas elabora el presupuesto de la empresa, por lo que el señor Urzúa habría estado involucrado. El presidente considera que el petróleo es la base de la grandeza de México, insiste en que el estado debe controlarlo y se opone a vender las partes de la empresa que pierden dinero. Rocío Nahle, la secretaria de energía, comparte las opiniones del presidente. El señor Urzúa puede haber chocado con ambos. Un plan que falla en la reforma de Pemex probablemente resultaría en una baja de la calificación crediticia de la empresa al estado de chatarra, dice Pablo Medina de Welligence, una consultora de energía.”
The New York Times
“Renuncia el Ministro de Finanzas de México, reprendiendo las políticas del presidente”, encabeza su análisis.
Este medio subraya que la decisión de López Obrador de construir una nueva refinería y el tren maya, en la Península de Yucatán, “han llevado a las agencias de calificación a revisar a la baja sus perspectivas para la solvencia de México. La encuesta más reciente realizada a los economistas del sector privado realizada por el Banco Central de México mostró que, en promedio, esperaban que el crecimiento alcanzara un poco más del 1 % este año.”
De acuerdo con Christopher Wilson, director adjunto del Instituto de México en el Centro Wilson, consultado por el medio estadounidense, “los problemas que llevaron al Sr. Urzúa a renunciar ejercerán una enorme presión sobre el Sr. Herrera, su sucesor”. "Su situación es virtualmente insostenible", explicó. "Se le pide que dirija un ministerio de finanzas que incluya a funcionarios que no deberían estar allí y se le pide que implemente políticas que no están bien fundadas".
A su vez, señala que “la Secretaría de Hacienda parecía relativamente aislada de la tensión entre los instintos políticos del presidente y la necesidad de contar con expertos técnicos, hasta que la carta del señor Urzúa hizo que el conflicto se hiciera público. La pregunta en el futuro es si la crítica pública del Sr. Urzúa tendría algún efecto sobre el presidente. ¿Aprendió el propio presidente una lección de esto? Si se administra adecuadamente, esta es, de alguna manera, una oportunidad para que haya una recalibración en términos de formulación de políticas".
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