En el corazón de barrio Güemes, del otro lado de la Pueyrredón, donde las veredas no fueron beneficiadas por la “gran campaña municipal de embellecer la Cañada”; donde el circuito turístico del impuesto Güemes Soho no llega, donde la segmentación del barrio se ve claramente, y la policía custodia muy bien ese cerco, para que ningún pibe lo cruce; ahí está nuestra sala de teatro, nuestro espacio cultural. Ahí se gestó y se gesta toda nuestra actividad artística.
Formación, experimentación, difusión cultural, por donde transitan artistas, alumnes, vecines y el público, que conforman, alimentan, y dan vida, a esta gran casa que es Bataclana.
Desde hace 12 años que estamos aquí, con todo lo que ello implica, ya que mantener de forma independiente y autogestiva un espacio cultural es un gran desafío, teniendo en cuenta las casi nulas políticas culturales por parte de los diferentes Estados. Y esto implica una apuesta consciente y constante de lo que somos y de lo que hacemos, y del lugar que ocupamos, tanto dentro del circuito teatral independiente, como de la identidad del barrio.
Como muchas otras salas, alquilamos el espacio, y en marzo de este año la propietaria nos informó (que por cuestiones económicas) pondría a la venta el inmueble. Actualmente ya se encuentra hecha la tasación, y el espacio se encuentra a la venta. Esta noticia nos impactó de lleno, ya que nuestra intención y nuestro proyecto es continuar apostando a la construcción teatral y a la entidad que hemos logrado generar y alimentar dentro del barrio.
Llevamos 12 años desarrollando nuestra actividad, contribuyendo a la práctica teatral independiente, otorgándole identidad concreta a esta actividad, construyendo y fomentando el desarrollo artístico de la comunidad, convencidos de que este camino recorrido es fruto de un largo trabajo y una decisión consciente del lugar que hemos logrado, y no está en nuestros planes dar por terminado esto, sino que todo lo contrario.
Desde que nos llegó la noticia no perdimos ni un segundo en empezar a gestionar la forma de poder comprarlo, acudimos al Instituto Nacional del Teatro (INT), pero la respuesta viene siendo que debemos esperar...
Esta respuesta es expresión de la preocupante situación que está atravesando el INT, los manejos que viene teniendo por parte de su dirección, el conflicto interno que se está desarrollando, el intento de vaciamiento de las políticas teatrales, el recorte en el presupuesto, la burocratización de su funcionamiento como una clara maniobra de ajuste encubierto; llevan a que este organismo que debe velar por fomentar y desarrollar la actividad teatral en nuestro país, nos diga “que debemos esperar”.
Incluso alertados por lo que está sucediendo con nuestra sala hermana de Tucumán, La Gloriosa, que también corre riesgo su permanencia; y donde el Instituto demostró no solo una falencia, sino una marcada decisión política de no apoyar a esta sala.
Esto marca a las claras cómo los espacios culturales somos los que debemos paliar las falencias estatales, la autogestión se convierte en eso: no hay subsidios por parte de las empresas de energía (como sí los hay para empresas privadas); los tramites de habilitación (que exige el estado) son inmensos y cada vez más costosos de realizar; no hay eximición de impuestos como rentas o inmuebles para las salas que alquilamos.
Es decir, todo un combo de trabas y complicaciones económicas que llevan a que todo el tiempo estemos en riesgo; y lo irónico de esto es que en nuestra provincia somos las salas de teatro independiente las que damos vida concreta a la actividad teatral; somos las salas las que mantenemos y fomentamos el desarrollo cultural.
Consideramos que si Bataclana cierra, implica no solo que cierre una sala de teatro, sino que cierra un espacio donde confluyen y se forman la expresiones culturales de nuestro barrio. Este es y seguirá siendo un espacio de resistencia, de creación y formación crítica, consciente y que a lo largo de estos años ha logrado formar parte de una identidad.
Por ejemplo, cuando la Policía de Córdoba (por orden de la justicia) nos allanó, los vecinos lejos de espantarse, se acercaron a solidarizarse, a preguntar si necesitábamos algo, etc. Y eso es expresión concreta de lo que logramos generar en ese vínculo cotidiano, y es la razón por la cual decidimos quedarnos acá y seguir abriendo esta puerta que no es solo nuestra, sino que les pertenece a todes les que toman este lugar como suyo.
Por eso, es que muy lejos de bajar los brazos, estamos dispuestos a hacer lo que sea para mantener en pie nuestra sala de teatro, nuestro espacio de formación, de experimentación y de difusión artística, porque eso es lo que nos define como artistas conscientes: la inquebrantable decisión de construir, de apostar, de crear lazos con el público, con vecines, con cada alumne, con les artistas que han llenado de magia el escenario, con cada persona que siente este lugar como suyo, con cada uno de los que forman parte de esta enorme casa que es Bataclana Espacio Cultural.
Llamamos a todes a que nos ayuden, a que aporten, a que se sumen a esta campaña ya que necesitamos recaudar $8.000.000.
La cuenta en la cual se puede realizar el aporte es:
0200917311000020250744
Colectivo Bataclana Espacio Cultural |