El Hospital de la Mujer, ubicado en la alcaldía Miguel Hidalgo, suspende el servicio de urgencias, tocoquirúrgica y terapia intensiva ante la falta de suministros.
"Ante las carencias de insumos tales como estudios de laboratorio básico y suturas quirúrgicas... le informamos que la atención de las pacientes en las áreas críticas del hospital... no es posible", se lee en un oficio fechado el 24 de julio dirigido a Benjamín Orozco Zuñiga encargado de despacho de la dirección del Hospital de la Mujer.
El documento firmado por el jefe de Urgencias, el jefe de la Unidad de Tocoquirúrgica y personal de Terapia Intensiva pide a la dirección del hospital "tomar medidas" para resolver la situación.
En el escrito advierten que "existe un elevado riesgo de complicaciones materno-fetales graves y/o mortales". Por esa situación se ha decidido suspender el servicio.
La política del gobierno federal de austeridad golpea nuevamente al sector salud y ahora a un hospital de especialidades como el Hospital de la Mujer. Si antes los pacientes o los familiares tenían que comprar algunos insumos, ahora las posibilidades para una atención urgente se cierran.
Esta política sólo deja en mayor vulnerabilidad a un sector de por sí vulnerable, como las mujeres, que en su mayoría encabezan las cifras de pobreza y desigualdad, y que en la mayoría de los casos no tienen acceso a una salud digna.
Por supuesto los trabajadores, médicos y enfermeros, tienen que lidiar con los problemas que implican los recortes al presupuesto; al igual que tienen que hacerlo los trabajadores del IMSS y el ISSSTE, que no cuentan con material suficiente para garantizar la salud de millones de derechohabientes, y los hospitales funcionan a medias, sin los aparatos necesarios, sin medicinas suficientes, incluso sin material básico necesario como guantes de látex. | 
