Desde el inicio del ciclo escolar anterior, 2018-2019, maestros interinos dieron clases a niñas y niños de escuelas públicas sin recibir salario. Un verdadero atropello: como si pudieran vivir y sostener a sus familias sin ingresos.
Son alrededor de tres mil los trabajadores de la educación afectados por la indolencia gubernamental. El adeudo asciende a unos 100 millones de pesos.
Por ese motivo, las secciones 2 y 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y el Sindicato Estatal de Trabajadores de la Educación (SETE) se fueron al paro. Hasta que no haya solución efectiva de su demanda no iniciarán las clases en Baja California.
Cada vez que los maestros enfrentan un agravio por parte de los gobiernos de turno, dan una gran lección a niños y jóvenes. Por eso desde este medio extendemos nuestra solidaridad. ¡Maestro luchando, también está enseñando! | 
