El desalojo del piquete del pasado martes 4 de agosto, sucedido en la rotonda de 3 y 26, generó una respuesta contundente del pueblo. Movilizaciones masivas en distintos puntos de la provincia, repudiando el accionar de Arcioni, de Massoni y de Loma Ávila, un paro contundente de Ctera y un paro de 72 horas del sindicato Camionero profundizan la crisis en la provincia.
En Buenos Aires, Finochiaro hizo promesas electorales. El Gobierno nacional se quiere despegar de la crisis de la provincia que ayudó a generar. Postales del futuro que se desarrollan en el sur del país. La lucha de las y los trabajadores de Chubut tiene que triunfar.
Tras el desalojo del piquete que sostenían los docentes y estatales en la rotonda de ruta 3 y 26 llevado a cabo por la patota de Loma Ávila con el aval del gobierno de Arcioni, quien liberó la zona y dejó actuar libremente a estos agentes de las petroleras, el pueblo de toda la provincia repudió este accionar y salió a bancar a los trabajadores en lucha, ganando las calles con movilizaciones históricas en Comodoro Rivadavia, más de 30 mil en una ciudad con menos de 300 mil habitantes y varios miles más en Rawson, Puerto Madryn, Trelew, Esquel, y hasta en el paralelo 42 donde confluyeron habitantes de El Bolsón y Lago Puelo en un corte de ruta intermitente convocado por organizaciones. Una verdadera respuesta de masas a este ataque.
El accionar de la patota del presidente de la empresa estatal Petrominera, Loma Avila, generó el repudió de todo el país. Por este motivo, el sindicato camionero declaró un paro por 72 horas en repudio a la represión y contra el aval del gobernador Mariano Arcioni a que haya patotas para-policiales que mantengan abierta la circulación en la rotonda de 3 y 26.
Este paro en los hechos vuelve a paralizar la producción de petróleo en los pozos, ya que no llegaran los equipos de perforación, ni los trabajadores y a su vez paralizara la circulación de todo los productos en la provincia, incluido los combustibles, mostrando la importancia de los gremios de servicios y la vinculación entre los estatales, docentes y camioneros, además de la solidaridad que venían desarrollando los trabajadores petroleros y la entrada en escena de los secundarios con la toma de escuelas y el apoyo popular a la lucha contra el ajuste que lleva adelante el gobernador, hombre de Massa, aliado de Macri y que como su jefe político, se alineó con la formula Fernández-Fernández en las PASO del pasado 11 de agosto.
Esta medida de los camioneros, hizo salir a decir a Massoni, que le da 24 horas a la patota de Loma Avila para que se vayan de la ruta. A su vez le pide a la Ministra Bullrich, nuevamente cuestionada por la reapertura de la causa Maldonado, a que envié a la Gendarmería a evitar nuevos piquetes docentes, la misma fuerza que asesino a Santiago.
Hay fuerzas para derrotar el ajuste de Arcioni
En esta nueva situación que se abrió tras la acción de la patota, generó un verdadero boomerang contra el gobierno, el ministro y el jefe de la patota. La dirección de la MUS (Mesa de Unidad Sindical) donde tienen predominancia el kirchnerismo, que había apostado a resolver la crisis, antes del desalojo, por la vía legislativa, confiando en que los legisladores de Arcioni votaran junto a los del PJ-FPV la ley de emergencia económica. Esa estrategia fracasó y abrió una crisis en la relación entre el gobernador y Alberto Fernández.
Luego del desalojo y la respuesta popular solo atina a pedir la renuncia de Massoni, jefe de Gabinete de ministros de Arcioni, quien estuvo presente en Comodoro mientras la patota del sindicato de petroleros desalojaban a los piquetes, y nuevamente en pos de salvar la alianza con Arcioni acompaña el pedido de la legislatura de interpelación al jefe de gabinete impulsado por el bloque del PJ-FPV para el próximo 17 de septiembre.
El jueves 5, en el marco del masivo paro nacional de Ctera, que se inició con un corte en Corrientes y Carlos Pellegrini impulsado por la agrupación Marrón, en repudio a la violencia contra los trabajadores en lucha, en Chubut hubo una masiva movilizaciones en Rawson y otras ciudades.
En Buenos Aires, Finnochiaro, ministro de Educación nacional, contradiciendo la política del macrismo durante los 4 años de gestión, le dijo a los representantes docentes que “se comprometía a gestionar el pago de los sueldos a los docentes para garantizar la educación en Chubut”, abriendo una nueva promesa de solución, luego de haber atacado a Arcioni por “dar aumentos salariales que la provincia no puede pagar”.
Declaraciones y promesas con tufillo electoral del gobierno, quien, derrotado y liquidado por el repudio popular expresado en las PASO, pretende no hacerse cargo de que la implementación a raja tabla de su política que desencadeno la grave crisis que vive actualmente la provincia, se quiere despegar que también son responsables de esta situación que por su política llevo a esta situación en la provincia, Finnochiaro y Macri sin futuro, hacen promesas de campaña que seguramente tampoco cumplirán.
Sin lugar a duda lo que muestra esta semana de lucha es que las ganas, predisposición y la fuerza para triunfar están aun con la tibieza de algunas direcciones sindicales y el boicot de otras el pueblo chubutense está dispuesto a enfrentar el ajuste de Arcioni. Por eso hay que discutir y votar un plan de lucha en asambleas y plenarios que le den continuidad a la pelea en curso y abra el camino al triunfo de los reclamos de las y los trabajadores de todo el país. Las y los trabajadores de Chubut están haciendo historia, merecen triunfar y derrotar el saqueo en curso. |
