Continuamos con la segunda parte de la entrevista al dirigente minero Jorge Juárez, Presidente de la Federación de Trabajadores Mineros y Metalúrgicos del Perú. Recordemos que este 10 de septiembre los trabajadores mineros realizarán una huelga nacional exigiendo que en su sector la negociación colectiva sea por rama de actividad, para de esa forma ganar más derechos para todos los trabajadores de la minería y también para poder enfrentar de mejor manera la reforma laboral que lleva adelante el presidente Martín Vizcarra. En esta parte de la entrevista, Jorge Juárez habla sobre el conflicto en el valle de Tambo, el adelanto de elecciones y la posibilidad planteada por el ejecutivo de dar vida a una nueva ley de minería.
Vimos que usted participó en una conferencia para la prensa en Arequipa con dirigentes del Valle de Tambo; para muchos puede ser contradictorio que un dirigente de los trabajadores mineros se reúna con dirigentes que tienen una postura claramente en contra del mega proyecto minero Tía María ¿A qué se debe que usted haya participado en esa conferencia?
Primero, hay que tener en cuenta que la minería es una actividad extractiva no renovable que se realiza en zonas donde viven campesinos y comuneros quienes muchas veces ven peligrar sus actividades básicas de subsistencia como la agricultura. Por eso, los trabajadores no somos ajenos a la problemática de las comunidades aledañas a los centros mineros, ya que se estima que casi el 80% es, a la vez comunero y trabajador de las empresas mineras.
En ese entender la lucha de los trabajadores mineros no puede estar divorciada de la lucha de los campesinos y las comunidades afectadas por la minería.
En segundo lugar, la presencia de la Federación Minera en esa conferencia de prensa, que usted menciona, tenía por finalidad exponer a la población el comportamiento de las empresas mineras con sus trabajadores, lo que pusimos en evidencia con bastante claridad ya que la empresa Southern Copper no respeta a sus trabajadores.
Esto se demuestra, por ejemplo, en el hecho que esta empresa ha tenido un laudo arbitral por el tema de la negociación colectiva y, amparándose en esos vacíos que de alguna manera aperturan los grandes estudios de abogados que contratan las empresas, terminaron impugnando este laudo arbitral y lo terminaron llevando a la vía judicial donde puede quedar 2 o 3 años paralizado. Esto ha generado que los trabajadores que pertenecen a ese sindicato se queden sin obtener el beneficio de su negociación colectiva, lo cual conlleva a que sus demandas queden paralizadas y congeladas, perdiendo así la posibilidad de tener algún beneficio, porque al judicializarse se empiezan a promover acuerdos individuales, a través de los cuales la empresa condiciona beneficios de manera personal a los trabajadores, a través de bonos, con la finalidad de dividir o quebrar los sindicatos.
Cabe mencionar que cuando se judicializan este tipo de laudos arbitrales, pueden extenderse los procesos hasta tres años, y en ese tiempo los trabajadores no tendrán ningún aumento salarial, pese a que hay una inflación en curso lo cual terminara afectando los ingresos de los trabajadores.
Cambiando de tema, nos gustaría saber su opinión frente a la propuesta de adelanto de elecciones del presidente Vizcarra.
Nosotros tenemos mucha desconfianza respecto a los discursos del presidente Vizcarra. Sabemos que detrás de cada propuesta de este señor siempre hay “un haz bajo la manga”. Está midiendo terreno. Esta propuesta simplemente ha sido - para nosotros - un tema de tirar las fichas y esperar las reacciones de la población, con lo cual se busca crear distracción en el pueblo.
¿Qué opinión le merece que antes de que anuncie el adelanto de elecciones, el presidente Vizcarra, vía decreto supremo, promulgó el Plan Nacional de Competitividad y Productividad?
Lo que han hecho es - poco a poco - materializar lo que expusieron en el CADE EMPRESARIAL el año pasado. Esta medida nos muestra claramente cuál es la orientación anti laboral que tiene este Gobierno. A pesar que han propuesto otra fecha para establecer las normas específicas basadas en la política que ya la dieron a través de este Plan de Competitividad y Productividad, la cosa nos va quedando clara y que este Gobierno está contra los trabajadores, por eso ahora lo que nos toca a nosotros es organizarnos para sumar y poder hacer acciones concretas de lucha para poder hacer retroceder esta orientación que viene impulsando el ejecutivo.
El presidente ha propuesto una nueva Ley de Minería, pero no ha especificado que va a contener esa nueva ley. Ustedes como trabajadores mineros ¿Qué creen que se deba discutir, si es que hablamos de una nueva Ley de Minería?
En relación a su anuncio de la nueva Ley de Minería, consideramos que es similar a sus demás anuncios. Solo los menciona para crear expectativas, pero no detalla en que van a consistir y como se van a implementar.
Creo que lo más correcto era que él exponga su propuesta de manera integral y nosotros, los gremios de trabajadores mineros, podamos discutir para tener una postura clara frente a eso. Pero tampoco somos ingenuos, ya que con las autoridades que tenemos, tanto en el ejecutivo como el legislativo que tienen una orientación pro empresarial, nos preguntamos ¿Qué ley de minería buscaran sacar?, lo que queda claro es que será orientada para el lado de los empresarios.
Si hacen una nueva ley de minería, definitivamente no afectará a los empresarios mineros, porque ellos son un grupo económico con mucho poder. Por esa razón, nosotros creemos que una Ley de Minería para que les siga asegurando sus ganancias a los grandes empresarios de la minería está por demás.
Nosotros creemos que sí tendría que haber una Nueva Ley General de Minería, esta debería contemplar, para empezar, la eliminación de la tercerización laboral. Así mismo, se debería de considerar aquí la realización de grandes cambios en el tema tributario, ya que a los empresarios de la minería se les devuelve más de lo que ellos aportan, además que gozan de contratos ley en casi todos los grandes proyectos mineros, lo cual les facilita la reducción de sus impuestos. Esto les permite también tener un precio de mercado distinto al precio internacional de metales, por ejemplo: en Tía María, Southern valoró 1 dólar por libra de cobre, cuando sabemos que en el mercado internacional la libra está entre 2.6 o 2.7 dólares. Esto contribuye a que los empresarios mejoren considerablemente sus negocios incrementando su rentabilidad hasta en 170% sobre su costo operativo, sin embargo, eso no se traduce en buenas condiciones laborales o en desarrollo para las comunidades aledañas a los grandes centros mineros. | 
