La mañana del 27 de septiembre de 2014 una masiva movilización de estudiantes politécnicos tocó las puertas de la Secretaría de Gobernación, exigían el alto de la Reforma a Ley Orgánica del Instituto Politécnico Nacional.
Éramos miles: varios estudiantes de otras universidades solidarizándose - yo aún no había ingresado al IPN- y estábamos ahí los militantes de la Agrupación Juvenil Anticapitalista - teníamos otro nombre es aquellos días.
Con sorpresa vimos como la imponente movilización había obligado a Osorio Chong a salir a ponerse en el templete al escarnio de tan masiva demostración de fuerza.
Fue en ese momento donde apenas un puñado de militantes de la AJA decimos hacer una manta improvisada: “¿Dónde están los normalistas de Iguala?" decía, aunque la habíamos hecho de manera precaria.
Para ese momento no se sabía cuántos estaban desaparecidos, un número incierto y que sabíamos por lo medios, superaba los 50. Mientras que estaban confirmadas 3 ejecuciones a manos de la Policía Federal y Municipal, así como el ejército.
Desde la frialdad de la política burguesa, Chong volteo a vernos y con micrófono en mano nos contestó con todo el cinismo: "Ya los estamos buscando".
Nunca voy a olvidar la rabia que me provocó aquella respuesta, el odio de clase que imprimió en mi, y mucho menos olvidaré lo que ese día quedó muy claro, para qué está hecha la institución militar.
Han pasado 5 años, pero aunque hay un nuevo gobierno, ahora nos quieren hacer creer que por eso el ejército ahora es amigo de los sectores populares y de los trabajadores. Nada más falso, Ayotzinapa fue producto directo de la militarización del país y la Guardia Nacional es continuidad directa de la militarización.
¡A 5 años seguimos exigiendo aparición con vida de los 43 normalista y sumanos desaparición inmediata de la Guardia Nacional y desmilitarización del país! |