Ante la dificultad para desplegar la Guardia Nacional y exponerla al repudio de los participantes en la jornada de protesta social del 2 de octubre, el gobierno federal en voz de Andrés Manuel López Obrador y el gobierno local de Claudia Sheinbaum llamaron a la “ciudadanía” a realizar un “cordón de paz” para evitar “destrozos” en la movilización del 2 de octubre,
Siendo que año tras año, la tradicional marcha es arropada por la población de la capital que así respalda el rechazo a la matanza e impunidad de los responsables de la tragedia del 68, el "cordón de paz" sería usado en realidad para separar a los manifestantes de la gente que acude a apoyarlos, mientras se continúa fomentando la idea de la violencia presente en los manifestantes.
Sin embargo, anónimamente, trabajadores estatales denunciaron que en no pocas dependencias están obligando al personal a nutrir el “cordón de paz”.
Como parte de este operativo parapolicíaco, ayer por la noche varias camionetas y autos blancos cargaban decenas de cajas que salían del edificio de gobierno, contenían playeras blancas con la leyenda “2 de octubre no se olvida”.
Este hecho gravísimo nos recuerda el peor corporativismo de los gobiernos priístas y perredistas que utilizaban la amenaza y la coerción para obligar a trabajadores estatales a nutrir sus actos, respaldar sus políticas y votar por ellos.
Así es como la Cuarta Transformación habla cínicamente de participación voluntaria para implementar el"cinturón de paz", mientras obliga a los trabajadores estatales a respaldar su política de represión para este 2 de octubre.
Este gobierno habla de unidad cuando es momento de acatar políticas que se nos imponen desde la Casa Blanca como la política migratoria y la Guardia Nacional, pero polariza a la sociedad cuando ve a un sector que ha estado movilizado desde el 26 de septiembre, haciendo ver al estudiantado organizado y en paro como un factor de inestabilidad, despolitizado y caprichoso que no tiene respaldo alguno y por debajo aparenta que son miles los ciudadanos quienes supuestamente de forma libre escogieron respaldar su llamado a preservar los comercios del centro histórico de Carlos Slim y sus amigos.
No contentos con la cadena financiada y orquestada desde el gobierno, Sheinbaum ha desplegado camiones y personal antimotines desde el Centro Histórico hasta Tlatelolco, una escena que nos recuerda la mano dura de su antecesor Miguel Ángel Mancera.
Desde La Izquierda Diario México repudiamos el actuar del gobierno de Morena que quiere golpear al estudiantado movilizado, criminalizando sus protestas y desplegando un operativo policíaco que empieza a ser desmedido.
Desde el movimiento de Trabajadores Socialistas llamamos a las organizaciones sociales, políticas, sindicales y de derechos humanos a fortalecer la movilización del 2 de octubre, porque con este despliegue, el gobierno de Sheinbaum nos recuerda, en tanto pretende utilizar a los trabajadores estatales como complemento de sus aparatos represivos, que a 51 años sigue vigente la lucha por la disolución de los cuerpos represivos. | 
