Cientos de trabajadores administrativos, académicos y estudiantes marcharon hacia Palacio Nacional y posteriormente bloquearon Eje Central, Avenida Juárez y Reforma para exigir un mayor presupuesto para el Telebachillerato.
El sistema de Telebachillerato está en 31 estados del país y cuenta con 3 mil 700 planteles para atender a una comunidad estudiantil de cerca de 150 mil estudiantes y cuenta con una planilla de 9 mil 700 trabajadores.
Los trabajadores denuncian que el presupuesto es tan escaso que no se han cubierto las quincenas de trabajadores y académicos y los estudiantes no cuentan con la infraestructura suficiente para desempeñar sus actividades académicas.
Los trabajadores presentaron en Palacio Nacional un pliego petitorio de 11 puntos donde destaca la exigencia de certeza laboral para todos los trabajadores.
A su vez denunciaron que no hay garantía laboral en todo el sistema de telebachillerato, sobre todo para las maestras que viven embarazos ya que ha habido amenazas de despido sólo por estar embarazadas.
A su vez, señalaron que la oferta educativa de los Telebachilleratos es para los sectores más precarios del país, recordando que el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo en campaña que se garantizaría el acceso a la educación para los más pobres del país.
El caso del Telebachillerato no es aislado, es parte de la austeridad republicana que golpea duramente a los trabajadores al servicio del Estado. Esta política tiene como objetivo el adelgazamiento del gasto público mediante despidos masivos en dependencias estatales y recortes que, como los de Telebachillerato, no son para los altos funcionarios sino para los trabajadores.
En el gremio universitario, la situación que atraviesa el Telebachillerato, se cruza con la crisis en 11 universidades que afecta a 60 mil trabajadores en sus pagos quincenales y prestaciones.
Es en este panorama que las principales direcciones sindicales deben romper la tregua con el gobierno y ponerse a la cabeza de una verdadera defensa de la educación pública que pasa también por garantizar condiciones laborales óptimas para sus trabajadores.
Es urgente abordar esta situación en el conjunto del sindicalismo universitario, miles de trabajadores hoy no cobran sus salarios gracias a la austeridad republicana y eso tiene que parar. |