Estos últimos 15 días nos cambiaron la vida a todos y todas. Por eso hoy, lunes, realizamos una asamblea en el Pedagógico, donde buscamos una manera de fortalecer la revuelta popular, con organización y articulación de toda la comunidad, por lo que tomamos la decisión de impulsar con fuerza una asamblea triestamental para el dia martes 5 de noviembre a las 10.30 de la mañana en pastos centrales. A la vez, como asamblea decidimos negarnos a cualquier diálogo con el Rector, que solicitó reunirse con los gremios de trabajadores, lo que fue propuesto desde la “mesa de coordinación intergremial”, pero nos negamos rotundamente.
Y es que Espinosa representa la cara de la crisis del Pedagógico, el autoritarismo universitario, el abuso a los profesores, el no pago de sus horas de trabajo, la inestabilidad laboral de no saber si nos renovarán contrato, representa la precarización a funcionarios con sueldos de 350 mil pesos que no alcanzan para fin de mes, mientras él tiene un sueldo de gerente que supera los 6 millones de pesos. Espinosa representa la educación de mercado y una formación docente insuficiente y precaria para las y los estudiantes.
La crisis politica en Chile abierta estas semanas nos ayuda a mirar de frente lo que vivimos al interior del Pedagógico, problemáticas que no podemos desligar. La consigna que gritamos en las calles, “no son 30 pesos sino 30 años”, es clara, porque no solo nos cansamos del alza del pasaje, sino de todo este sistema, de las AFPs y sus pensiones precarias, de los sueldos de hambre que tenemos, del negocio de la salud y la educación de mercado. Nos cansamos de este sistema neoliberal heredado de la dictadura.
Los partidos de la ex Concertación, también buscan que todo vuelva a la normalidad, apoyando la Agenda Social de Piñera, imponiendo que la fuerza de nuestra movilización sea desviada y así salvar al Gobierno. Mientras quienes conforman la Mesa de Unidad Social y que están a la cabeza de organismos como la CUT, la Confech o el Colegio de Profesores, del Partido Comunista y el Frente Amplio, en primer lugar sacaron de nuestras demandas echar abajo al gobierno, y luego convocaron a “huelga”, pero solo lo hacen para presionar a una mesa de diálogo con un gobierno asesino profundamente deslegitimado, siendo también un salvavidas para Piñera.
Confían en que una acusación constitucional, que depende de los viejos partidos que forman parte del Senado, va a ser una solución a nuestras demandas. O que en ese parlamento, lleno de ladrones y corruptos, vamos a poder negociar una constitución que responda a las necesidades del pueblo y los trabajadores. Esta ilusión no es más que una traición a quienes nos hemos movilizado y enfrentado la represión: ¡ninguna negociación con los asesinos del pueblo!
Es que el gobierno de Piñera no dudó en sacar a militares y Fuerzas Especiales a la calle para acallar la movilización, disparando lacrimógenas y perdigones, y perpetuando decenas de asesinatos, violaciones y torturas, dejando a miles de heridos, e incluso secuestrando a dirigentes estudiantiles. Este gobierno tiene las manos manchadas de sangre. Por eso, no vamos a salir de las calles mientras los responsables de estas violaciones a los Derechos Humanos sigan en la impunidad. ¡Exigimos juicio y Castigo! ¡Libertad inmediata a todos los presos por luchar!
Por esto, para la asamblea triestamental proponemos:
1 Organizar la huelga general para que caiga Piñera
Las calles ya hablaron: Miles gritamos “¡fuera Piñera!”. Por eso, es necesario organizarnos y debatir en asambleas de base, para preparar una huelga general hasta derribar a este gobierno criminal. Organizando nuestra organización y autodefensa en comités y coordinaciones, e impulsando comités de huelga hacia la preparación de una gran huelga general para echar abajo el gobierno de Piñera.
2 Enfrentemos la crisis del Peda: ¡Que la comunidad decida!
A la vez que nos organizamos junto a trabajadores, secundarios y vecinos del sector. Donde la asamblea triestamental se convierta en una instancia para comenzar a desarrollar un proceso democrático de refundación de la universidad, que nos permita pelear por un claustro triestamental resolutivo, para sacar a Espinosa y que el conjunto de la comunidad decida el curso de la universidad.
3 ¡Juicio y castigo a todos los responsables de violaciones a DD.HH.!
Y, siguiendo el ejemplo de la carrera de Filosofía en que profesores y estudiantes decidieron hoy denunciar la represión y la impunidad a la violaciones de Derechos Humanos, pongamos en pie iniciativas como las que impulsaron desde la asamblea de Filosofía para denunciar los crímenes impunes, como comisiones de resguardo, difusión y DD.HH.
4 Por una asamblea constituyente que enfrente el régimen heredado de la dictadura
Finalmente, sabemos que junto con sacar a Piñera, en las calles se impuso la necesidad de una Asamblea Constituyente. Siendo aún un debate abierto para quienes nos venimos movilizando, ya que se trata de derribar la herencia de la dictadura pero hasta los poderes del Estado, como el Presidente de la Corte Suprema o el Presidente del Senado, hablan de un proceso constituyente. Y hasta el mismo gobierno se refiere a “cambios estructurales”.
Pero para nosotras y nosotros, esta asamblea constituyente tiene que ser libre de estos poderes y de quienes no tienen nada que ver con nuestras vidas y los motores de nuestra movilización, y debe ser soberana, para que el pueblo y los trabajadores decidamos. Por esta razón, proponemos que se discuta abierta y democráticamente. Sintetizando los debates en una comisión, para que de conjunto decidamos la asamblea constituyente que necesitamos.
¡Nos vemos en la asamblea triestamental! | 
