Con el amplio triunfo del Frente de Todos en una elección muy polarizada, el peronismo, esta vez de la mano de Axel Kicillof y Verónica Magario, vuelve a gobernar la Provincia de Buenos Aires, aunque, con minoría parlamentaria que los llevaría a negociar con las bancas cambiemitas. El sur del conurbano bonaerense, gran aportante de votos al triunfo del peronismo, es una de las zonas donde el ajuste de Cambiemos golpeó duramente. En algunos municipios, sin distinción de la fuerza política que lo administra, se manifestó de manera más visible, teniendo en cuenta cierres de fábricas, despidos directos e indirectos bajo el nombre de “retiros voluntarios” y jubilaciones anticipadas. Así también, y de un modo más silencioso pero escandaloso, los índices de pobreza fueron sumando puntos en detrimento de la calidad de vida con un importante aumento de la precarización y demandas estructurales sin resolver desde hace años. En este contexto, la campaña del Frente de Izquierda Unidad se desarrolló con la participación de decenas de trabajadores de distintos sectores que se transformaron en colaboradores activos, como también la sumatoria de nuevos simpatizantes que fueron aportando su granito de arena para que las propuestas que pregonaba Nicolás del Caño llegaran a miles en todo el país.
“Teniendo en cuenta que la campaña del FIT-U la hicimos a pulmón, fue realmente satisfactoria más allá del porcentaje obtenido”, decía a este diario Marcelo, trabajador de Coca Cola. De la misma manera, para Alejandro, ferroviario de la línea Roca: “Los resultados no fueron los esperados de acuerdo a la campaña que llevamos adelante que tuvo mucha llegada porque la gente ve que no son como los políticos de los partidos tradicionales, que son todos millonarios. Hay una simpatía con Nico y con la izquierda por sus propuestas y porque son laburantes. Pero, los resultados cedieron a la polarización instaurada por los medios de comunicación”. Como planteaba Darío, del mismo sector: “Los medios hicieron que la elección se transforme en un Boca-River polarizando entre Macri y Fernández. Lo mismo sucedió en el debate. Nico estuvo superbien pero al día siguiente, los diarios y los noticieros hicieron que la gente se enfocara en los dos candidatos principales, a pesar de que ven comparten las ideas que propone la izquierda”.
Desde el Doque, Roberto, petrolero de Shell-Raizen opinaba que el FIT-U “es víctima de los medios de comunicación que lo estigmatizan por las medidas tomadas en conflictos laborales/estudiantiles”. A pesar de esto, está seguro que puede convertirse en tercera fuerza. Ernesto, trabajador aeronáutico rescataba que las propuestas de la izquierda “son certeras y priorizan sectores vulnerables. La llegada que tuvieron es producto de un arduo trabajo que debe seguir creciendo desde la militancia. Se hizo todo lo posible para llegar a las masas, pero es desproporcional la estructura del FIT-U frente al resto de los partidos funcionales al sistema. Mucha gente reivindicó la enorme campaña”. Mientras tanto, para uno de los papeleros de Ansabo, protagonista junto a sus compañeros de una de las luchas más importantes del municipio de Martiniano Molina resaltaba el hecho de que la izquierda además de presentarse a elecciones, esté presente en las luchas: “A lo largo de estas semanas, fui viendo cómo aportan en todo, y además de eso, me pone contento cómo va creciendo más el núcleo de la izquierda entre mis compañeros”.
A Juan, trabajador de la línea Roca, le pareció una “campaña copada con mucha llegada y con mucha participación en la calle, en los conflictos, en las fábricas siempre apoyando los reclamos de los trabajadores”. Siguiendo el hilo, en este escenario de polarización planteado, luego de una campaña militante a pulmón y creativa, es muy valioso el resultado porque deja constancia de la enorme pelea que el FIT-U dio contra los partidos tradicionales en defensa de su espacio político.
“Me encontré con gente contenta diciendo que Nico, que la izquierda tiene que estar en el Congreso porque plantea cosas copadas”, plasmaba Ricardo ferroviario, también de la línea Roca. “Pasa que hay mucha gente que no cree que sean medidas posibles, como por ejemplo nacionalizar la banca”, completaba. Un debate importante para dar en pos de derrumbar la idea de que los bancos deben estar en manos privadas o una banca pública subordinada a los intereses de los empresarios que no hace más que extraer riqueza al conjunto de la sociedad. De ahí, la necesidad de poner en pie un sistema bancario estatal gestionado por los trabajadores, donde democráticamente se pueda decidir dónde destinar los recursos de acuerdo a las necesidades estructurales más acuciantes.
Otra cuestión importante que marcó Ricardo fue en torno al primer debate: “Me pareció muy bien que Nico utilizara su espacio para realizar un minuto de silencio por los muertos en Ecuador, reivindicando las luchas que se están dando en los países vecinos”. Es que precisamente, en medio de la polarización eleccionaria en algunos países de América latina emergían rebeliones contra las políticas de ajuste que indican la crisis del sistema capitalista y la vuelta a la lucha de clases. Y, en ese contexto, una nueva experiencia con un gobierno peronista que invita a los gordos de la CGT a ser parte del mismo, reivindica a Rucci e insiste con el “Pacto Social” y por otro lado la necesidad de continuar la construcción de una fuerza política de los trabajadores, las mujeres y la juventud que fortalezca su presencia en los lugares de trabajo y de estudio, también en los barrios, como interpelaba Carlos, otro de los trabajadores de Ansabo.
Mientras tanto, avanza la rebelión popular en Chile y Nicolás del Caño no se quedó en el minuto de silencio, sino que viajó a ese país para solidarse con el pueblo trabajador que movilizado enfrenta las medidas de ajuste del gobierno de Piñera y la herencia pinochetista exigiendo su renuncia. Además, en la tarde de este domingo, Evo Morales tras consumarse el golpe de Estado en Bolivia, anunció su renuncia a la presidencia. es las Fuerzas Armadas habían pedido su renuncia, convalidando el accionar de la derecha y la Policía. En Argentina, Nicolás del Caño, Christian Castillo y Myriam Bregman, entre otros, repudiaron el hecho y refuerzan la invitación al acto que el PTS en el Frente de Izquierda y de Trabajadores Unidad realizará este sábado 16 de noviembre en Ferro en apoyo al pueblo chileno y en repudio al golpe en Bolivia, por una alternativa socialista de los trabajadores en América Latina, y que contará con la presencia de algunos de los protagonistas de la rebelión. Porque, como afirmaba Ezequiel, trabajador precarizado en un taller metalúrgico de Villa Domínico “Chile dDespertó y más que nunca, es necesario profundizar el camino de unidad de la clase trabajadora. Con el apoyo a la lista de Nico Del Caño dejamos claro que vamos a enfrentar el ajuste en Latinoamérica".
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