Este miércoles, en la Cámara de Diputados, Nicolás del Caño (PTS-FIT) pidió que se discutiera el otorgamiento de un bono de emergencia. Oficialismo y oposición rechazaron la propuesta. Sin embargo votaron aumentar el presupuesto de las FF.AA..
Elisa Carrió festejó en las redes sociales. “Un triunfo del Congreso: aprobamos el reequipamiento de las Fuerzas Armadas!”. Cualquiera podría pensar que festejaba un proyecto propio. O de cualquiera de los (muchos) derechistas que integran el interbloque de Cambiemos. Pero no.
Un triunfo del Congreso: aprobamos el reequipamiento de las Fuerzas Armadas!
El proyecto de creación del Fondo Nacional de la Defensa (FONDEF) fue presentado por Agustín Rossi (FpV-PJ). El santafesino -cuyo nombre suena como futuro ministro de Defensa- quiso empezar con el pie derecho -literalmente) su nueva relación con la institución represiva. Por eso armó una ley para “financiar el proceso de reequipamiento de las Fuerzas Armadas”.
Para cualquier persona que se identifique como progresista, el anuncio causa un poco de escalofríos. Más aún cuando, del lado norte de la frontera, las FF.AA. son parte de un golpe contra el gobierno de Evo Morales. Que festeje Carrió ya dice mucho.
Sin embargo, lo lamentable del asunto no termina ahí. En la misma noche en que decidió aportar dinero para re-equipar a las fuerzas represivas, Diputados rechazó discutir un bono de emergencia para trabajadores, jubilados y quienes perciben planes sociales, como la AUH. La propuesta fue presentada por el diputado Nicolás del Caño (PTS-FIT).
En su intervención, el ex candidato presidencial de la izquierda planteó un pedido de apartamiento del reglamento para poner en discusión su proyecto de ley, donde se estipulaba el otorgamiento de un bono de emergencia para quienes sufren los golpes mas duros de la crisis. En el caso de los jubilados, plantea un pago de extraordinario de $ 8.000, a abonar antes del 31/12/19.
En los fundamentos de la propuesta, la izquierda señala que “la inflación se incrementó 284% desde noviembre de 2015 a octubre de 2019; los salarios del sector registrado 211%. En la transición entre el gobierno saliente y el entrante se aceleró el saqueo sobre las condiciones de vida: para noviembre se espera una inflación muy elevada, según anticipan muchas consultoras”.
La propuesta de Del Caño fue rechazada por un bloque que incluyó a macristas, peronistas y kirchneristas. Según consta en las actas de votación, referentes de todos esos espacios se unificaron para que ese proyecto no se discutiera en el recinto. Desde el peronista José Luis Gioja hasta el macrista Luciano Laspina se unieron para no discutir una medida elemental que podría mejorar el nivel de vida de millones de personas.
Esa misma unidad fue la que se expresó a la hora de votar un aumento de partidas para las Fuerzas Armadas. Un aumento que también se realizó por medio de un apartamiento de reglamento, en este caso pedido por el kirchnerismo.
Revisando las actas de votación se encontrará que a la propuesta de Rossi sumaron voluntades macristas como Eduardo Amadeo, Elisa Carrió, Nicolás Massot, Graciela Ocaña y Pablo Tonelli. Como se ve, la idea está muy lejos de ser “progresista”. Como no podía ser de otra manera, en el bloque del FpV, la casi totalidad de votó el proyecto. Las excepciones fueron los ausentes. ¿Progresismo? Te la debo.
Estas dos votaciones dicen bastante sobre el futuro que viene, bajo el gobierno del Frente de Todos. Ya Alberto Fernández anunció que serán “tiempos difíciles”. Por su parte, la CGT y las conducciones sindicales anuncian que no pedirán un bono de fin de año. Del otro lado del mostrador -aunque no tanto- las empresas piden más beneficios impositivos mientras siguen despidiendo y suspendiendo.
Este miércoles por la noche, en el Congreso, el Frente de Izquierda fue el único espacio que planteó una medida de emergencia real e inmediata frente a los durísimos golpes al nivel de vida de las mayorías populares. Macristas y peronistas se unieron para rechazar la propuesta de Del Caño. Por delante de los jubilados y los sectores más humildes, pusieron a los integrantes de una de las instituciones más reaccionarias del país: las Fuerzas Armadas.
