El Tribunal Oral en lo Criminal N° 1 de la localidad bonaerense, integrado por los jueces Miguel Gáspari, Guillermo Burrone y Danilo Cuestas, condenó a seis policías por el abandono de persona seguido de muerte de los siete jóvenes que fallecieron asfixiados y quemados el 2 marzo de 2017 en la comisaría de Pergamino. Nora Cortiñas estuvo presente para sumarse al reclamo de justicia por los siete jóvenes.
Familiares y amigos escucharon la sentencia que condenó a los seis imputados a penas de entre 6 y 15 años de prisión. Los condenados son Sergio Rodas, condenado a 8 años, Brian Carrizo y Matías Giuliett a 11 años, Carolina Guevara a 6 años. Todos gozarán del beneficio de prisión domiciliaria. En tanto Alexis Eva fue condenado a 14 años y el comisario Alberto Donza que estuvo prófugo durante 14 meses, deberá cumplir la pena de 15 años. Serán los únicos que quedarán detenidos.
El argumento del tribunal para otorgarles la prisión domiciliaria es por "la emergencia carcelaria".
Según informa El Diario del Juicio, la fiscalía a cargo de Nelson Mastorchio, pidió condenarlos de acuerdo a la carátula con la que la causa llegó a juicio oral y público: abandono de persona seguido de muerte. Por eso solicitó: 15 años para el ex comisario Alberto Donza; 14 años para Alexis Eva; 13 años para Matías Giulietti y para Brian Carrizo; 11 años para Sergio Ramón Rodas y 9 años para Carolina Guevara. “¿Qué hicieron los policías para rescatar y evitar el incendio? Nada”, manifestó el fiscal durante su alegato.
Mastorchio resaltó que lo ocurrido “no sólo no lo evitaron, sino que obstaculizaron el accionar de terceros”. El fiscal destacó que aquel día, los policías no hicieron nada para evitar que el fuego se propague, ni llamar a los bomberos ni utilizar los dos matafuegos que habían, uno en la oficina del comisario y otro en la oficina de guardia. “Actuaron con conocimiento y voluntad de realización de consecuencias producidas” sentenció.
La masacre
El 2 de marzo de 2017, Sergio Filiberto, Fernando Latorre, Alán Córdoba, John Claros, Franco Pizarro, Juan José Cabrera y Federico Perrota murieron asfixiados y quemados, encerrados en la celda 1 de la comisaría 1° de Pergamino, donde había 19 presos alojados. En la audiencia de hoy familiares y amigos tuvieron que volver a escuchar cómo los policías dejaron morir asfixiados a sus seres queridos.
De acuerdo a las autopsias, todos murieron por inhalación de monóxido de carbono y sofocación a raíz de la presencia del fuego. Según el Ministerio Público Fiscal, los policías no dieron el auxilio inmediato desde el primer foco de incendio, luego impidieron el ingreso a tiempo de los bomberos "para la salvaguarda de las víctimas".
La Masacre de Pergamino se produjo en pleno gobierno de Vidal y su ministro de Seguridad Ritondo, un gobierno que se fue con récords de muertes en comisarías y cárceles. Pero la "crisis" carcelaria de la que ahora parece sorprenderse la nueva gestión precede al macrismo y el peronismo fue un gran artífice de la maldita policía y el maldito sistema penitenciario. Allí está la Masacre de Magdalena de 2005 como muestra.
Apenas conocida la tragedia, las familias de los chicos muertos y sectores que se solidarizaron, no dejaron de exigir justicia y de denunciar la masacre y cómo habían sido los hechos. Desde el primer momento, cada mes, al cumplirse un aniversario, se movilizaron para exigir que se condene a los policías responsable. Desde el primer día pelearon por justicia.
La bronca estalló entre los familiares. Porque se los condenó por abandono de personas, cuando, como se demostró durante el juicio, fue homicidio porque no permitieron que los bomberos actúen en tiempo y forma. Además, a pesar de las condenas, los policías que fueron responsables de la muerte de los 19 jóvenes, se van a su casa tranquilos y eso es una muestra de la impunidad que gozan las fuerzas de seguridad y que el poder judicial les otorga. |