Tras un informe de la Comisión de Observadores de DDHH de la Casa Memoria José Domingo Cañas, el cual expone los gastos que han hecho todas las regiones en compras de Bombas Lacrimógenas, Antofagasta queda con el puesto numero cinco de entre las que mas han gastado en esta cuestionada arma de represión masiva.
Santiago lidera el ranking represivo con $796.632.579 en Lacrimógenas, luego Valparaíso con 101.332.545, Bío Bío $49.673.524 y Coquimbo $39.096.899, quedando Antofagasta en el quinto lugar con $33.787.791 (treinta y tres millones setecientos ochenta y siete mil setecientos noventa y un pesos).
Preocupante cifra, dado la misma escalada de represión que se vive en Antofagasta con bombas vencidas y ataques a personas a transeúntes a la cual se le suma la integración del nuevo Jefe de Zona a Antofagasta: El General Rodrigo Medina, quien antes era Jefe de Zona de la Región del Bio Bio, en donde Concepción fue epicentro de grandes atrocidades de represión a manos de ésta institución.
Son claras las prioridades económicas de las autoridades regionales, como Karen Rojo (alcaldesa) y Edgar Blanco (Intendente) quienes se muestran a favor de la represión y prefieren gastar en aplastar a las personas que se manifiestan antes que en destinarlas a resolver las urgentes necesidades de las grandes mayorías.
Mostrándose claramente como no representantes de los intereses de la población que piden democracia y no mas precarización, sino como enemigos de las demandas del pueblo trabajador, parándose en la vereda del autoritarismo y represión.
En este sentido, cobra importancia las voces populares que van creciendo, como la de la Disolución de las Fuerzas Especiales las cuales solo ha cumplido el rol de reprimir manifestantes, violar derechos, teniendo un camino libre con impunidad o condenas ridículas.
Al mismo tiempo, destacan las voces de la destitución misma de la Alcaldesa, el Intendente y el Jefe de Zona de Carabinero; y la exigencia de verdad, juicio y castigo en los casos de violaciones a los Derechos Humanos, y a los responsables materiales y políticos de los hechos de represión contra el pueblo trabajador.
Y frente a las necesidades sociales, se hace necesario la pelea por nacionalizar los recursos naturales, para que no hayan corruptos ni empresarios ladrones que se aprovechen de las riquezas del país, sino que los recursos sean gestionado y administrados por los mismos trabajadores y las poblaciones quienes requieren de éstos para solventar sus viviendas, salud y todas las demandas sociales urgentes que se han puesto sobre la mesa estas últimas semanas.
Siendo el poder indiscutible de las movilizaciones las que pueden imponer y lograr todos los objetivos que trabajadores y la población se propongan, se hace necesario que las centrales como la CUT y organizaciones como la Mesa de Unidad Social convoquen a un plan de lucha hacia un paro nacional para que pueda entrar a la escena las y los trabajadores y trabajadoras con grandes convocatorias y paralizaciones, en perspectiva de una huelga general para imponer una verdadera Asamblea Constituyente Libre y Soberana para discutir estas necesidades.
Adjuntamos el informe de la Comisión de Observadores de DDHH de la Casa Memoria José Domingo Cañas:
|