Los despidos se dan en un contexto de negociación de mayor flexibilización laboral y de suspensiones de trabajadores para que recaiga en ellos los costos de las bajas de producción producto de la ampliación de la planta. Los trabajadores además denuncian que en los galpones se persigue a los que se niegan a realizar los trabajos de los despedidos. La bronca acumulada exige medidas contundentes del sindicato UOM.
Telegrama de despido
“No hay crisis en la empresa, quieren mas ganancias, son insaciables. Están ampliando la planta para llenarse los bolsillos aún más mientras nosotros no podemos pasar las fiestas y las vacaciones tranquilos con nuestras familias. Hay que pararles todo” comentaba uno de los trabajadores que se encontraba en el ingreso de la planta.
El Movimiento de Agrupaciones Clasistas se solidarizó con los obreros y manifestó en un comunicado que "la CGT regional tiene que pararle la mano a la empresa". Llamó a la unidad de los trabajadores y opinó que debe haber una "asamblea general para que todos votemos medidas para defender a los compañeros". |