El presidente Alberto Fernández recibió este jueves en Casa Rosada a los directivos de las principales compañías petroleras con inversiones en nuestro país. Participaron de la audiencia el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; el secretario de Energía, Sergio Lanziani, y el presidente de YPF, Guillermo Nielsen.
Si bien a la salida de la reunión el presidente señaló que "se va a mantener" el precio de la nafta por ahora, abrió la puerta para futuros aumentos. Les propuso a los empresarios que le acerquen un “esquema" para implementar los incrementos que solicitan para estudiarlos.
Como ya había adelantado, Alberto Fernández reafirmó que enviará al Congreso de la Nación una ley para para promover las inversiones en Vaca Muerta.
Según la información que trascendió, no se abordó la situación de los despidos y suspensiones en Vaca Muerta. Este viernes, el titular del sindicato de petroleros privados, Guillermo Pereyra, se reunirá en Buenos Aires con el ministro de Trabajo, Claudio Moroni y con Matías Kulfas.
El gremialista adelantó que solicitarán una reunión urgente con los presidentes de las empresas petroleras, los gobernadores de Neuquén y Río Negro y autoridades nacionales para consolidar "un acuerdo general".
Los trabajadores petroleros se encuentran en estado de alerta con más de 600 telegramas de despidos y más de 1200 trabajadores suspendidos. Esto se suma a que el 28 de enero vence la conciliación que frenó el año pasado 2000 despidos y suspensiones.
"El día 28 se activarán todos los despidos. No hace falta mandar un nuevo telegrama porque ya están enviados. Hay muchas cosas que tenemos que discutir y todas estas asambleas terminan el 23 con una gran movilización en Neuquén Capital, en donde tenemos que demostrar que todos juntos apostamos por el trabajo y la paz social, porque se están agotando los tiempos", afirmó Pereyra.
Si bien el dirigente sindical reafirmó públicamente su apoyo al Gobierno nacional, presiona con paralizar la producción hidrocarburifera, para que se firme un acuerdo general con las empresas.
Teniendo en cuenta el pasado de Pereya, que viene de firmar en 2017 con Macri el acuerdo Vaca Muerta, que profundizó la precarización laboral de miles de trabajadores, no se puede confiar en que vaya a defender los intereses de los petroleros. |