Tener plata es tener la mejor defensa ante la justicia. Y esto queda expresado con el caso del empresario Raúl Schüler, quien en Octubre del año 2018 fue sorprendido en su casa con decenas de piezas y monumentos de relevancia histórica, en su fundo de San Francisco de Mostazal, en la VI Región de O’Higgins.
Y es que luego de a meses de llevarse a cabo la investigación por el receptación de bienes, y la infracción a la ley de monumentos nacionales y la norma sobre control de armas, por la cual arriesgaba cuatro años de cárcel, el juez del Ministerio Público, acogió la solicitud de reformalización del empresario para llegar a un acuerdo reparatorio, consistente en el pago de $50 millones de pesos para reparar el mal causado y $12,4 millones aproximadamente correspondientes a tres multas, además de la devolución de piezas históricas, de acuerdo a lo señalado en el medio Bío Bío. Producto de esta determinación, el empresario podrá cumplir su pena en libertad vigilada.
Schüler, en sus declaraciones señaló “He gastado una brutalidad de dinero comprando todas estas cosas. Tenía un proyecto de vida y una de mis maneras de sentirme realizado era dejar todo esto como herencia, encuentro que en este país destruyen todo, no hay memoria de nada. Yo quería conservar este patrimonio arquitectónico rural para el país”.
Justicia para ricos y justicia para pobres
El acuerdo llegado por Schüler, es la expresión más clara del carácter de clase que tiene la justicia, donde por ser un empresario y ostentar riquezas, es capaz de salir libre de polvo y paja, incluso sustrayendo obras de arte e incluso patrimoniales, con el sólo fin de satisfacer su repugnante ego. Mientras el pueblo pobre, comerciantes, jóvenes precarizados son golpeados, detenidos e incluso encarcelados, por buscar las maneras de cómo sobrevivir.
Recordado es el caso de Bastián Arriagada, joven de 22 años que fue encarcelado durante 61 días en la Cárcel de San Miguel por vender CD’S piratas, y quien murió posteriormente en el terrible incendio del año 2010.
Pero no es de extrañar, es así como funciona la justicia parara los empresarios, los Luksic, los Matte, los Angelini, y toda esa casta de políticos corruptos implicados de los caso Penta y SQM.
Mientras el gobierno busca criminalizar a la juventud, queda claro del lado dequien queda la justicia amarrada de la Constitución de Pinochet, de los ricos y poderosos que hacen y deshacen como quieren con la vida del pueblo trabajador. |