En la mañana de este lunes la fiscal Verónica Zamboni, que investiga el asesinato de Fernando Báez Sosa, pidió la presión preventiva de ocho de los rugbiers acusados de homicido agravado, mientras que ordenó la liberación de dos de ellos.
Quienes deberán permanecer en prisión son: Lucas Pertossi, Luciano Pertossi, Enzo Comelli, Máximo Thomsen, Blas Cinalli, Ciro Pertossi, Enzo Comelli y Ayrton Michael Viollaz, ya que existen “elementos de convicción suficientes para considerarlos responsables de los hechos objeto de investigación, con el grado de participación ya analizado”, según lo indica el escrito que envió la fiscal al juez Mancinelli. En tanto, Alejo Milanessi y Juan Pedro Guarino podrían ser liberados si es que el juez está de acuerdo con el pedido de la fiscal.
En la causa, Ciro Pertossi y Máximo Thomsen están acusados de ser co-autores del crimen, mientras que el resto son considerados partícipes necesarios.
El crimen de Fernando, que recibió una golpiza brutal y letal, fue cometido en la madrugada del 18 de enero en la puerta del boliche Le Brique de Villa Gesell.
Como venimos analizando desde este medio, este crimen atroz que terminó con la vida de un joven, desnudó la doble vara de los apologistas penitenciarios de siempre y develó a un “punitivismo progresista” peligroso y revanchista.
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