Diversas marchas y movilizaciones se realizaron a lo largo del país a 4 meses del 18 de octubre. En la ciudad de Antofagasta, donde las poblaciones han recibido una brutal represión, fueron más de 1500 personas que se movilizaron. También hubo protestas en Valparaíso y enfrentamientos con las Fuerzas Especiales en Plaza de la Dignidad en Santiago.
En ese escenario el gobierno ha decidido responder con represión a cada una de las manifestaciones que se realizan, mientras avanza el proceso constituyente trucho controlado por los partidos tradicionales.
Por esto, a 4 meses del estallido de la rebelión que remeció a Chile y al mundo entero, este viernes 21 de febrero tenemos que ser cientos de miles a nivel nacional en las calles, y en Santiago retomar la Plaza de la Dignidad para enfrentar la represión del gobierno y prepararnos para marzo.
¡Seamos miles en las calles este nuevo viernes de movilización! ¡Vamos por un plan de lucha con la perspectiva de una huelga general! ¡A fortalecer la organización de las y los trabajadores y la juventud!
Todos han dicho que marzo será un mes movilizado. Pero la movilización debe organizarse. Para esto es necesario fortalecer todas las instancias de auto organización, como el Comité de Emergencia y Resguardo en Antofagasta, las Asambleas Territoriales o las Brigadas de Salud, y poner toda la movilización en que se despliegue un verdadero plan de lucha con la perspectiva de una huelga general.
Para eso se hace necesario que la CUT, las centrales sindicales y la Mesa de Unidad Social se propongan seriamente preparar esta perspectiva, considerando el 8 de marzo como una fecha clave de movilización, para que pueda entrar efectivamente en escena la clase trabajadora.
Con la huelga general y poniendo en movimiento la fuerza de las y los trabajadores podremos derrotar a este gobierno, sacar a Piñera y terminar con este régimen heredado de la dictadura militar, abriendo así el camino para la conquista de una verdadera Asamblea Constituyente, realmente libre y realmente soberana, sin vetos, restricciones ni con ninguna institución del viejo régimen sobre ella.
Una Asamblea Constituyente que pueda discutirlo todo, y donde se parta por resolver la nacionalización de los recursos naturales bajo gestión de sus trabajadores para financiar las necesidades de las grandes mayorías como pensiones dignas, fin a la AFP, salud y educación gratuita, entre otras demandas sentidas que se han planteado en la calle.
Y en ese camino, abrir la pelea por terminar con este Chile de los capitalistas y por la conquista de un gobierno de los trabajadores, como forma de resolver íntegra y definitivamente estas necesidades.
¡Retomemos la Plaza de la Dignidad este viernes!
¡Por un plan de lucha hacia marzo para preparar la huelga general!
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