Se trata del primer largometraje de Melina Matsoukas protagonizado por Daniel Kaluuya (Slim) y Jodie Turner-Smith (Queen). La película se suma con polémica y personalidad a la era del Black Lives Matter. Con una estética y música que seducen, nos introduce en el amor, el racismo, la brutalidad policial, el compromiso, la persecución y la protesta.
Black Lives Matter en la pantalla
En los últimos años hemos podido disfrutar de series y películas inspiradas en este movimiento de protesta que se desató hace varios años en los Estados Unidos, y otras, que por fuera de ese contexto concreto tomaban como transfondo el racismo social e institucional en otros momentos.
En estos años pudimos ver películas y series como Blindspotting, The Hate U Give o Monsters and men, todas ellas de 2018 y anteriormente Fruitvale Station (2013), película inspirada en la vida de Oscar Grant uno de los jóvenes asesinado en manos de la policía cuyo caso despertó la rabia e impulsó este movimiento. Series más recientes que se apoyan en la denuncia al racismo son When They See Us (Netflix, 2019) o Dear white people (2017).
El hecho de que existan todos estos ejemplos demuestra la profundidad del movimiento que abofeteó al mundo y el impacto que tuvo y que sigue teniendo. El calado de la cuestión hace transcender ese espíritu de protesta y convertirse en un recurso habitual en el cine, la música y el arte.
El movimiento del Black Lives Matter (nuestras vidas también importan) surgió en agosto de 2014 cuando un policía asesinó a un adolescente negro en Ferguson. Durante diez días consecutivos esa pequeña ciudad de Missouri vio manifestaciones exigiendo justicia. Las protestas se extendieron rápidamente a las principales ciudades de los Estados Unidos y pusieron el grito de Black Lives Matter en las calles. Pero el asesinato de Michael Brown, símbolo del movimiento que nacía, no fue ni el primero ni el último hecho de brutalidad policial.
Este movimiento puso de relieve a nivel internacional la profundidad del racismo en los Estados Unidos, su caracter estructural y como se expresaba de la manera más brutal en los casos de jóvenes negros asesinados por la policía y la impunidad con la que goza. Reabrió la conciencia sobre ello, algo que aún hoy está latente.
En este caso la película presenta la realidad con todas sus contradicciones. Desarrollada en pleno estallido de este movimiento, vemos en sus escenas el clima al que se ha llegado con el agotamiento de la política de ampliación de derechos civiles, todo ello en el marco de una crisis histórica del capitalismo, y la respuesta que se empiezó a dar ante la persistencia del racismo y la desigualdad. Así se expresan en la película diferentes salidas ante la situación de pobreza, desigualdad y estigmatización, violencia del estado y la policía.
A través de los protagonistas y de los personajes secundarios encontramos esa combinación perfecta de contrarios. |