Como ya es tradición, la Xunta publicaba en el Diario Oficial de Galicia (DOG) la resolución para este año de “ayudas económicas” para medios de comunicación, sumando un total de casi 2 millones de euros. Según expresa en el propio documento, estas ayudas se realizan porque “la libertad de expresión y de difusión constituye un derecho fundamental y una de las bases esenciales de convivencia democrática”. Además, alega que sirven también para
fomentar el uso de gallego en las empresas de comunicación y radiofónicas.
Pero, ¿es verdad que este dinero va destinado al mayor uso de la lengua gallega y en pro de la libertad de expresión? Como veremos a continuación, desgraciadamente la respuesta es negativa e, incluso, todo lo contrario.
Concesiones realizadas a dedo
De todos es sabido que hay ciertos grupos empresariales y corporaciones que tienen a bien promover e impulsar determinados discursos y defender a según qué políticos y partidos. Los “lavados de cara” y la propaganda partidista son el día a día de la prensa burguesa. En el ámbito gallego, es más que obvio cómo la defensa a la figura de Feijóo y de su gobierno ha impulsado campañas electorales y propiciado que lleve ya 11 años como presidente de la Xunta de Galicia, algo que podría volver a darse debido al actual panorama político gallego.
Por ello, la noticia de un nuevo reparto de dinero a ese tipo de prensa, a pesar de ser grave, no nos sorprende. Entre los años 2009 y 2017 se contabiliza que la Xunta invirtió un total de 21,6 millones de euros en financiar a los medios de comunicación, pero ¿a quién se les otorga y por qué motivos?
Como toda concesión económica, esta convocatoria tiene sus bases reguladoras para que las distintas empresas puedan solicitarla, y coinciden con las del año pasado. De los casi 2 millones de euros de este año, el 63,5% será asignado a prensa en papel, y el resto entre empresas radiofónicas y actividad en internet. Entre los requisitos, el uso del gallego en prensa en papel debe ser de un 10% del total de información y en radio un 50%, sin especificar el porqué de esta distinción, y que se deben comprometer a incrementar progresivamente el uso del gallego.
Asimismo, la cantidad de dinero que se le otorga a cada uno depende en su mayoría del número de ventas u oyentes (un 74%) y no del uso del gallego, quedando este relegado a segundo plano. Por ello, no es extraño descubrir que la principal corporación que se beneficia de esas ayudas sea la Corporación Voz de Galicia que, casualmente, es la menos crítica y más defensora de la causa del PP gallego.
Esta corporación recibió el año pasado cerca de 877.000 euros, más de un 44% del total y muy lejos de cualquier otro grupo. Otros periódicos que igualmente reciben una considerable cantidad de dinero son Faro de Vigo y El Progreso de Lugo, ambos periódicos también en castellano. En cuanto a radio, los que mayormente se benefician son el Grupo COPE y Ondacero, perteneciente a Atresmedia.
Estos datos no hacen más que revelar que las ayudas presentadas como favorecedoras de “la libertad de expresión” y la lengua gallega, son una mera excusa para llenar los bolsillos de la prensa afín al actual gobierno. Las bases de las convocatorias son deliberadamente realizadas con el fin de preservar el dominio de los medios por parte de Feijóo, por lo que podemos decir que, al uso, son concesiones hechas a dedo.
Manipulación también en la pública
La lacra de la manipulación de prensa no se limita sólo a la empresa privada, si no que es seña de identidad de los medios de comunicación públicos gallegos. La dirección de La Corporación Radio e Televisión de Galicia (CRTVG) se basa en promover programas vacíos de contenido o de entretenimiento y una pobre cobertura de la actualidad.
Tal y como expresaban desde la plataforma DefendeAGalega en una entrevista para Izquierda Diario: “Venden cantidad, porque lo que interesa son los formatos que no permitan ahondar en las cuestiones, contextualizar o promover el debate, no le vayamos a dar a la gente herramientas para que piense por sí misma.”
Y es precisamente esta plataforma de profesionales de la comunicación gallega quienes están denunciando la situación en la CRTVG. Llevan ya 95 jornadas de protestas de “Viernes Negro” en contra de la “manipulación, desmanelamiento, delegaciones cerradas y apenas producción propia en la CRTVG”.
El amplio control que tiene el Gobierno de Feijóo de los medios de comunicación en Galicia condicionará totalmente los resultados de las elecciones del próximo 5 de abril, de no ser aplazadas por la crisis del coronavirus. Por ello es necesario impulsar un periodismo contrario a las dinámicas de poder capitalistas, hacer uso de la contrainformación y desvelar las injusticias de este sistema lleno de mentiras. | 
