Este decreto viene acompañado por las medidas que anunciaron desde el gobierno nacional, provincial y de la CABA, que contemplan el cierre de todas las escuelas, y de las fronteras por dos semanas para minimizar el tránsito del virus.
La medida municipal abarca desde los comercios de la ciudad, pero también a restaurantes, pizzerías, bares, hasta dependencias municipales. La contra cara de esta medida son las condiciones en las que quedan los trabajadores de estos lugares: quienes trabajan en negro (cabe aclarar que es la gran mayoría de este sector) no recibirán su sueldo durante las próximas dos semanas.
Desde La Izquierda Diario reproducimos algunos testimonios:
Soledad (moza de eventos): ‘’ Podemos quedarnos en casa, salir para lo justo y necesario. Podemos llevar las aulas a nuestros hogares. Podemos enseñar y transmitir a nuestros hijos, toda la información que se nos proporcione, sobre la higiene y como prevenir el contagio del virus.
Lo que no podemos es esperar a que los nuestros mueran de hambre por un Estado que no garantiza la sustentabilidad de todo un pueblo. Que, dicho sea de paso, antes de que esto suceda ya estaba pasando necesidades. Un Estado que no aseguré la estabilidad económica, para quienes más lo necesiten en estos momentos. Es un estado que de antemano ha fallado’’.
Nahir (moza de restaurante): ‘’A nosotros nadie nos va a dar nada, tenemos que pagar alquiler, más los gastos cotidianos, y al estar mitad en blanco, mitad en negro nadie nos garantiza una cuarentena "con goce de sueldo" nos chocamos con la realidad de nuestros compañeros que tienen hijos que alimentar, que alquilan, que viven con lo que trabajan en el día.
Tomaron medidas preventivas sin tener en cuenta a todos los trabajadores en negro y precarizados, siempre el problema es de clase, y este caso los que salimos perdiendo somos nosotros, es la pandemia de la precariedad.’’
Agustina (trabajadora de local de comida): ‘’ Nosotros trabajamos mitad de jornada blanqueada nada más, es casi lo mismo que estar en negro. Una cagada. Mi jefa nos dijo que si la obligaban a cerrar no nos iba a pagar nada. Y así es.’’
Carla (cajera de supermercado): ‘’Entiendo lo de la cuarentena, pero, el gobierno tiene que hacer algo con aquellos que viven el día a día. Un bajón. Tendrían que suspender el pago de alquileres como hicieron en Italia o Francia. Yo tengo Familia que trabaja en negro. Mi hermana se quedó sin trabajo, por ejemplo.’’
Jimena (comercio): ‘’Esta bien que hay que tomar todas las precauciones, pero nadie nos va a pagar estas 2 semanas ya se trabaja por 2 mangos ¿Encima sin paga? Me parece un desastre.’’
Rocío (pizzería): ‘’Nos comunicaron que nos van a pagar hasta el 31, pero que, si después de esa fecha no nos llaman, ya no tenemos más trabajo. Nos dejan siempre con una mano atrás y otra adelante. Tengo una hija de 4 años y alquilo, y sin una fuente de ingreso fija no sé de qué manera voy a continuar subsistiendo’’.
Macarena (camarera de café): "Lxs pibxs nos encontramos a diario trabajando en condiciones realmente precarias e irregulares como por ejemplo, trabajar sin luz con temperaturas de más de 40 grados en cocinas sin ventilación, tenemos que rogar para que nos compren una crema para las quemaduras, y ni que hablar cuando nos enfermamos y estamos obligados a trabajar igual, porque te echan o no te pagan el día, hasta te amenazan con despedirte si no vas al día siguiente, te duele la cabeza y te descuentan el ibuprofeno que te tomas, ante la pandemia sanitaria nos mandan a nuestras casas sin nuestro sueldo. Es imposible para cualquier familia, subsistir 15 días en esas condiciones. Por eso creo que tenemos que organizarnos en todos los lugares de trabajo. No podemos permitir este avance sobre nuestra fuente de trabajo."
Estos son algunos testimonios de como ya golpea la crisis causada por el coronavirus, sobre las condiciones de vida más vulnerables de la clase trabajadora. Entre ellos y ellas son muchísimo los y las que se encuentran al margen de cualquier marco legal, carecen de derechos sindicales y no pueden defenderse de la prepotencia de los dueños y encargados.
¿Por qué no se les exige el blanqueamiento de todos los trabajadores en negro? Por ejemplo. Quienes, entre otras cosas, no tienen cobertura de salud, algo imprescindible en tiempos de pandemia ¡Aumento del presupuesto de Salud de forma inmediata, es una medida urgente!
Como venimos exigiendo desde el PTS en el FIT-U, es momento de tomar medidas de emergencias y urgencia que garanticen la protección de la población. Las empresas y el Estado quiere descargar la crisis sobre las espaldas de las y los trabajadores.
Esta crisis no es responsabilidad de las y los trabajadores. Son necesarias las licencias pagas para garantizar la sustentabilidad económica durante la cuarentena.
Necesitamos organizarnos en los lugares de estudio y de trabajo para exigirle al Estado que estas medidas se lleven adelante. Medidas básicas para que la crisis generada por el virus no la paguen los trabajadores que sufren la precarización laboral. |