Minutos después de los anuncios de Alberto, a algunos jóvenes con las peores condiciones de trabajo, les avisaron por wasap que las empresas no van a cerrar durante los próximos diez días. Operadores de call-centers, servicios técnicos de internet como Telecentro o Cablevisión, monotributistas, trabajadores en negro, etc. |
La precarización laboral no es algo nuevo en la vida de los trabajadores pero, ante la crisis se evidencia más aun el capitalismo salvaje. Rappi, Glovo, Pedidos-ya, son ejemplo de eso, que sin tomar ningún tipo de medida de seguridad, “avisaron” a sus trabajadores que podían seguir pedaleando igual. Los que peor trabajan, tienen que elegir si comer o exponerse ante un virus.
La peor parte de todo esto, es que este tipo de puestos de trabajo no son esenciales para el momento que estamos atravesando, pero la precarización y los sueldos miserables, nos atan a los trabajadores a esos trabajos. Ejemplo de eso son los trabajadores de las empresas de telecomunicaciones, los chicos que conectan y hacer el servicio técnico del internet, que fueron obligados a asistir hoy a sus puestos de trabajos, no para garantizar que nadie deje de estar comunicado, sino para que las empresas no pierdan un peso de ganancia.
Los grandes empresarios no son parte de la pandemia, al parecer, porque ellos se encuentran hace varios días guardados haciendo cuarentena, mientras que la juventud sale a pedalear o a pata para que estos se llenen los bolsillos a costa de nuestras vidas. El dinero les sobra, sino preguntémosle al Alberto Fernández, que pagó alrededor de 5000 millones de dólares, a la “deuda”, aunque ninguno sabe dónde está toda la plata que entró al país durante el macrismo y desde de la asunción de Alberto.
La solidaridad obrera se vuelve real en ejemplos concretos. En Jujuy, en el terciario n°11, fabricaron 300 barbijos, en el marco del Proyecto que llamaron "Producción de Barbijos reutilizables y resistentes”. Los mismos no están destinados a comercializarse sino a los trabajadores de la salud que vienen haciendo frente a la atención en los hospitales y puestos de salud sin los recursos materiales necesarios para preservar su propia salud. También los docentes de físicoquímica y biología del colegio técnico San José de Rosario, la semana pasada fabricaron 40 kilos de alcohol en gel para uso de la comunidad educativa.
Entonces, ¿quién mejor que los trabajadores para poder organizar el país de la mejor manera?
Por ejemplo, si las empresas de estuvieran manejadas por los trabajadores, se podría garantizar que haya internet y telefonía fija, en todos los barrios para que nadie quede incomunicado. Las empresas de comida rápida podrían fabricar comida más saludable y repartir a todas las personas que estén en situación de calle o necesiten alimentarse. Sin fines de lucro, poniendo todo nuestro conocimiento a la comunidad, porque en este pandemia los que estamos perdiendo nuestra vida somos los de abajo. Además de los estos servicios, muchos callcenters están puestos en función de la ganancia y no de la atención frente a posibles contagios. Llamar a las líneas de emergencia implica demoras de más de 1 hora para consultar por síntomas solamente. Sin embargo podrían estar en función de complementar la cadena de salud capacitando a los trabajadores/as para realizar esa tarea.
Esta es la única salida para la clase trabajadora porque los gobiernos capitalistas no piensan tocar las ganancias de los que lucran con nuestra salud y nuestras vidas. |