El 12 de marzo Priscila P. junto a Monserrat P. fueron detenidas por FF.EE en el marco de las movilizaciones protagonizadas por estudiantes en todo el país, siendo victimas de insultos lesbofibicos, y golpes por parte de personal de carabineros, incluso en sus testimonios relatan cómo a una de ellas intentaron asfixiarla.
Ante los hechos el Instituto Nacional de Derechos Humanos de la Región del Bio- bio presentó una querella criminal contra la institución con el objetivo de poder visibilizar y proteger a las jóvenes ante el violento hostigamiento que sufrieron las dos manifestantes.
En los últimos meses hemos conocido varios casos similares, las fuerzas represivas del estado le declararon la guerra a todos los que decidieron salir a luchar en contra de este chile neoliberal, hoy día podemos ver cómo esto se desarrolla en diversas denuncias y testimonios que contribuyen a nuestra memoria, sin embargo la represión no es un episodio cerrado.
Sebastián Piñera con la crisis provocada por el COVID -19 ha sacado a los milicos a la calle, con el objetivo de fortalecer el control sobre una población que es arrojada a la enfermedad y la miseria, es por eso que la denuncia de hechos como los que vivieron estas jóvenes a comienzos de mes deben ser denunciados con fuerza a la vez que nos organizamos para que el gobierno no deje en las manos de las milicias y los carabineros la crisis sanitaria, entregándoles solo más facultades para reprimir. |