La pandemia del coronavirus puso de relieve problemas estructurales profundos; por un lado un sistema de salud colapsado con falta de recursos, desde lo más básico como los elementos de seguridad e higiene y falta de personal hasta falta de infraestructura y cantidad de respiradores, por ejemplo.
En Tucumán hay una crisis social y sanitaria que es anterior al virus: el 46% de trabajo no registrado y el 10% de desocupación. Es decir: más de la mitad de la población hoy no sabe de qué de que va a vivir o cómo va a pagar los servicios básicos.
Gran cantidad de estas personas perdieron sus trabajos o lo están por perder.¿Cuánto tiempo van a poder subsistir las/os trabajadores que trabajan el día a día?
El gobierno anuncio ayudas sociales extraordinarias ante la pandemia, un monto de 10 mil pesos para trabajadores no registrados y monotributistas y un bono de 3 mil pesos para quienes cobran jubilaciones mínimas y AUH. Esta ayuda puede demorar un mes en su implementación.
Por otro lado con la inflación y el aumento del costo de vida esto representa menos de lo mínimo para poder sobrevivir. Según el INDEC, una familia de cuatro integrantes necesitó $ 40.373,01 para superar el umbral de pobreza en enero de 2020.
Exigimos un bono mensual de 30 mil pesos para todas las personas que perdieron su trabajo. Que se eliminé el cobro de los servicios básicos mientras dure la crisis!.
Las y los docentes no estamos ajenos a esta realidad que afecta a la mayoría de las familias de nuestros alumnos. La mayoría de las escuelas no estaban en condiciones para empezar las clases y tampoco para enfrentar una pandemia.
Sin agua en muchos establecimientos y sin insumos de higiene básicos difícilmente puedan adoptarse medidas de prevención, y si bien ahora las escuelas están cerradas en su mayoría algunos comedores escolares continúan funcionando con grandes dificultades.
Con 21 pesos no se puede elaborar un menú nutritivo para nuestros alumnos, asimismo se pone en peligro la continuidad de la alimentación de miles de niños y jóvenes debido al cierre de algunos comedores y mucho del personal son personas en franja de riesgo y el gobierno no designa otras que las reemplacen.
Desde la Agrupación Marrón Docente, planteamos que el Estado tiene que invertir las prioridades. Hay que invertir lo que sea necesario en salud y poner en marcha un plan real de asistencia a las familias trabajadoras que están padeciendo la pandemia por su situación de precariedad. Hay que dejar de entregar millones en la deuda externa.
Por otro lado como medida concreta urge la implementación de test masivos, empezando por los trabajadores de las salud que están expuestos, la sola estrategia de la cuarentena no es suficiente para "aplanar la curva" de infectados si no se testea de manera masiva a la población. Lo hicieron países como Alemania o Corea del Sur y lo recomiendan especialistas de la OMS.
No se puede combatir una pandemia endureciendo las medidas represivas; en Tucumán ya se denunció a la policía por diversos abusos y coimas, y se denuncian a nivel nacional decenas de hechos de violencia y represión. A 44 años del golpe genocida decimos que no damos vuelta la página, el ejército de ayer es el mismo que el de hoy!
¿Qué rol debemos jugar, en el medio del aislamiento social obligatorio, los trabajadores de la educación y los sindicatos docentes ante una crisis que se lleva por delante a nuestra comunidad educativa?
Tenemos que ser la voz que exija medidas serias y un plan integral para enfrentar esta pandemia. Queremos test masivos, presupuesto para salud, insumos y medidas de seguridad e higiene para todos los que se ponen en riesgo para que la vida cotidiana siga funcionando. Mantengamos en pie la unidad que logramos con los trabajadores de la salud, hoy necesitan todo nuestro apoyo en sus reclamos por los elementos de seguridad e higiene.
Creemos que las escuelas y los sindicatos tienen que estar presentes. En primer lugar, exigiendo al Estado medidas de emergencia ante la crisis sanitaria, la entrega de bolsones de mercaderías y canastas de útiles en cantidad y calidad para todas las familias que lo necesiten y la garantía de la provisión del Estado de todas las medidas de higiene y seguridad para que el reparto se haga en óptimas condiciones, evitando todo riesgo de contagio, sin exponer a los trabajadores de la educación ni a las familias a la posibilidad de la propagación del virus.
Desde la Agrupación Marrón estamos impulsando una encuesta para ver en cada barrio cómo afecta la crisis, si los comedores están funcionando para que ningún chico se quede sin comer. Queremos impulsar la solidaridad y hacer llegar alimentos a los comedores que tienen escaso presupuesto y ser los portavoces de todo atropello a la las familias de nuestros alumnos.
Los docentes que estamos en las escuelas de toda la provincia y tenemos contacto con los padres podemos jugar un rol en mostrar una salida a la crisis. Desde la Agrupación Marrón te invitamos a que seas parte. |