Para JP Morgan, esto significa un decrecimiento del 35.5 % del Producto Interno Bruto para nuestro país. La firma prevee el escenario más oscuro con respecto a otras; Scotia Bank, GEA, Bank of America, Moodys BBVA y Credit Suisse preveen una caída de entre 4 y 5 %. Goldman Schachs, Santander, Banorte, City Banamex y Barclays lo sitúan entre 2 y 3 % aproximadamente.
El sector informal en México es la mayor parte de la fuerza productiva, situándose en 56 % de la población económicamente activa. Las medidas de distanciamiento social obligatorio impactarían fuertemente a este sector, a la vez que todo indica que pronto México entrará en la fase 3 de contingencia para prevenir el contagio del COVID19.
Sin embargo, unas de las cuestiones que afectarán gravemente la economía mexicana son, por una parte, los anuncios tardíos del gobierno de López Obrador, el cual ha insistido en que la gente continúe con su vida de manera normal, esto a pesar de que la OMS fue la primera en decretar la fase 2 de contingencia y no el gobierno a través de la Secretaría de Salud (SSA). Por otro lado, la recesión mundial podría empeorar el panorama ya de por sí sombrío de las economías dependientes, al que se suman las medidas unilaterales de cada país —a diferencia de hace una década, cuando hubo más coordinación internacional para afrontar el quiebre de Lehman Bros..
Lo que desnuda la crisis del COVID19, por una parte, es la fragilidad del país, el cual no se encontraba preparado para lidiar con los efectos de una pandemia. Asimismo, deja ver que el gobierno mantuvo la dependencia económica con Estados Unidos, hoy el país más golpeado por el coronavirus; falta ver si el incremento de contagios en el gigante del norte cobrará factura en estas semanas al sur del Bravo. |