La pandemia del coronavirus dejó al desnudo la crisis que atraviesa la salud pública. Los trabajadores y trabajadoras son los primeros en alertar sobre esta situación. Los trabajadores y trabajadoras del quirófano, del hospital Castro Rendón, denunciaron a través de las redes sociales esta realidad: “No somos héroes, somos trabajadores arriesgando nuestras vidas con pocos recursos”.
“No tenemos recursos para cuidar y cuidarnos todos, pero igual vamos a ponerle el cuerpo”, afirman y demuestran que son ellos, quienes, a pesar del vaciamiento, defienden la salud pública.
Marcos Campos, referente del sector detalló que “el principal problema es la falta de personal e insumos”. Y que éste “es un reclamo histórico del sector junto a la infraestructura, camillas, camisolines, máscaras, que ante una pandemia la situación se agrava y se pone en riesgo la salud de los propios trabajadores”.
En este sentido, señaló que “para combatir el corona virus es necesario, además de la cuarentena, realizar tests preventivos al personal de salud que estamos expuestos constantemente”.
También hace falta “contratar inmediatamente todos los médicos y enfermeros necesarios. Incorporar el personal para cubrir los puestos de quienes deban estar en cuarentena”.
Aseguró que, para dar una respuesta a la altura de las necesidades de la población, en esta provincia hay recursos. “Deben provenir del sector de la salud privada y de las empresas petroleras que se llevaron millones durante estos años”.
En este sentido destacó la importancia de “la organización y la solidaridad de los trabajadores es clave para exigir al Estado las condiciones dignas de trabajo y de atención a los pacientes”.
La salud pública está jaqueada por la crisis sanitaria. El desfinanciamiento del sector sumado a las derivaciones al sector privado, deja únicamente bajo la responsabilidad de quienes trabajan, hacerle frente a esta crisis de magnitudes históricas.
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